Una pinza multifuncional: carga pesada y ligera En la aplicación del sistema uno de los puntos más complicados fue el diseño de la pinza que debía reconocer y agarrar las cajas de plástico en cualquier posición, explica Frode Grimsbo, ingeniero de servicio de Kuka Robotics. Por esta razón, la pinza ha sido equipada con sensores de ultrasonidos para el control de las distancias. De este modo, se puede guiar al robot, con la mayor velocidad posible, a la primera posición de agarre. Cuando se ha acercado a la caja, la garra de apriete se queda de momento suelta hasta que ha encontrado la posición de agarre ideal. Únicamente en este momento aprieta la garra. Mediante una técnica de succión, el robot es capaz de retirar palés vacíos. El KR 180 PA está ocupado en un 65% con esta tarea. Durante el tiempo restante se encarga de preparar los pedidos que anteriormente han sido clasificados por trabajadores de la empresa. Desde el ordenador central se comunica a los preparadores el tipo de producto que debe ponerse en una caja de plástico. Pedidos con fluctuaciones estacionales El robot KR 180 PA y las unidades de control KR C2 permiten que durante el “Midsommar” (la época alrededor del solsticio de verano), permite que salgan del área de pedidos de Tonsberg entre 500 y 900 TN de productos cárnicos. El robot logra procesar 10TN diarias, trabajando las 24 horas del día, siete días a la semana. En la instalación robotizada, se preparan cinco productos distintos al mismo tiempo. La flexibilidad del sistema permite su adaptación a los cambios de producto. Gracias a su sensible y, a su vez, estable garra, el robot Kuka es capaz de cargar cajas tanto ligeras como pesadas (de hasta 25 Kg). Cuando las cajas están llenas, son transportadas al robot que las recoge y coloca en un almacén automático vertical (paternóster) para su transfe- rencia a la cinta transportadora. Si tras su identificación, el ordenador central indica al robot que tiene un producto equivocado, la caja es descartada. Otro aspecto de los productos de alta rotación es que se suelen pedir en grandes cantidades sobre todo en picos de demanda como el Midsommar, la época alrededor del solsticio de verano, por lo que el robot debe levantar pesos de hasta 25 Kg. Este fue otro desafío en el diseño de la pinza, advierte Frode Grimsbo, hemos tenido que desarrollar una garra lo suficientemente estable que le permite llevar cargas más pesadas. Y, al mismo tiempo, que fuese capaz de manejar cajas muy ligeras. m&a ������������������������������������� ������������������������������� ����������� ���������������� ����������������� ������������������������� Soluciones