senta independientemente de la temperatura y del estado emocional. Esta alteración suele iniciarse en la infancia o la pu- bertad y, normalmente, si no se trata, dura toda la vida. Se es- tima que el 1% de la población padece hiperhidrosis primaria, que afecta de igual manera a hombres y mujeres. Informes y Estudios 65 Las regiones fuente de la hiper-sudoración pueden ser cara-ca- beza, axilas, espalda, palma de las manos y planta de los pies. La sudoración incontrolable puede ocasionar molestias significati- vas, tanto en el plano físico como en el emocional. en la superficie de la fibra mediante un tratamiento específico, que suele ser posterior al proceso de hilatura; o modificación propia del polímero y aplicación de sustancias bio-activas. La incorporación de agentes anti-microbianos en polímeros es una práctica usual. Se añaden para protegerlos de la degrada- ción producida por microbios o para proporcionar propieda- des bactericidas a la superficie externa de los textiles. Los aditivos antimicrobianos a base de plata (en estado metálico o iónico) están tomando protagonismo frente al resto dada su eficacia bactericida frente a un amplio rango de microorganis- mos.También se emplean agentes biocidas alternativos como el cobre. Olor, una consecuencia del sudor Las bacterias de la piel proliferan en el ambiente húmedo y cá- lido de nuestra ropa propiciado por el sudor. Cuando las bacte- rias se reproducen desprenden gases, que son los responsables de los olores de la transpiración. Al tratar la tela con antimicro- bianos, se evita que las bacterias que se transfieren de la piel o del medio ambiente se reproduzcan en la ropa (se neutraliza la Planteado el problema (sudoración) y, antes de adentrarnos en las posibles soluciones, aclararemos que existen dos posibles abordajes del problema: emplear agentes biocidas contra los ‘productos’ del sudor, o gestionar el sudor (limitando su canti- dad y facilitando su rápida evacuación o intercambio con la at- mósfera). La actividad física del organismo genera calor metabólico que se regula y enfría mediante la sudoración corporal. (Foto gentileza de EMT. Madrid) e body physical activity creates metabolic heat which is regulated and cooled by means of the body sweat (Photo courtesy of EMT, Madrid) La capacidad de la plata para conservar la comida y bebida frescas y puras ha sido reconocida desde los primeros años de la civilización, mucho antes de que la existencia de las bacterias fuera conocida. Hace un siglo, con un mayor conocimiento del papel de las bacterias en nuestro entorno, se iniciaron las ex- perimentaciones para mejorar los tratamientos médicos con el poder antibacteriano de la plata. Sin embargo, el precio del metal y las dificultades técnicas para reducirlo al tamaño de partícula microscópica limitaba su aplicación. El problema del tamaño se superó con el advenimiento y des- arrollo de la nanotecnología (ciencia de lo diminuto). La “nano” es una dimensión: 10 elevado a -9. Esto es, 1 nanóme- tro = 0,000000001 metros. Un nanómetro es la mil milloné- sima parte de un metro, o millonésima parte de un milímetro. Así, en un milímetro albergaríamos, puestos en línea, un ‘ejér- cito’ de un millón de nanómetros. Es la grandeza de lo dimi- nuto.Aunque no conviene dejarse llevar por el ardor de la nano-ciencia que, cercana a sus albores, no deja de ser una bella rosa cuajada de espinas. proliferación bacteriana). Obviamente, la disminución de las bac- terias conlleva la reducción del volumen de gas que despren- den, reduciéndose el mal olor asociado. Algunas prendas de vestir, como son calcetines y ropa interior, han sido tratadas con antibacterianos desde hace muchos años. La tecnología textil puede ya incorporar nano-partículas de plata al polipropileno para desarrollar material antimicrobiano susceptible de usarse en cualquier cosa, desde alfombras a ser- villetas, prendas de vestir o mascarillas quirúrgicas. La plata ha acreditado médicamente su efectividad letal contra 650 organismos causantes de enfermedades, además de ser muy segura. Combinando plata y polipropileno para crear una fibra orgánica-inorgánica, los investigadores han desarrollado una fibra antimicrobiana con un amplio campo de uso. La fibra de polipropileno es una de las fibras sintéticas más uti- lizadas en la industria textil por ser más barata y resistente que otras fibras sintéticas. Los investigadores han demostrado, según se publicaba en la edición de julio de Polymer Interna- tional, que pueden producir dos tipos de fibras con nano-partí- culas de plata distribuidas uniformemente en la fibra. Científicos de la Hanyang University de Seoul (Korea) han em- JOBWEAR 61 2o TRIMESTRE 2012 El control de bacterias, hongos y ácaros puede lograrse usando técnicas de acabado textil, un valor añadido con fuerte de- manda por parte del consumidor actual. Los productos antimi- crobianos controlan olores, decoloración, manchas y degradación, que son el resultado del ataque microbiano a los textiles. Con independencia de si la fibra es natural o artificial, la industria emplea varios métodos: incorporación de sustancias antibacterianas y antifúngicas dentro del proceso de hilatura; aplicación y fijación de sustancias antibacterianas y antifúngicas Plata, el decano de los desinfectantes Nano-partículas de plata: ha llegado la nano-tejeduría