Editorial Redes sociales sí, en todos los casos Aunque el cliente de una empresa sea el distribuidor, es impres- cindible no olvidar que todo el mundo está enganchado a las redes sociales: los comerciantes, los directores de compras, los gerentes, y así una larga lista que culmina, por supuesto, con los clientes finales que somos todos. La red con más cantidad de usuarios, Facebook, introdujo, casi fi- nalizando el año, una nueva utilidad: facilitar la comunicación di- recta usuario-marca por medio de mensajes privados. El administrador de una página de Facebook puede gestionar esos mensajes, pero para poder comunicarse con los usuarios la inicia- tiva debe partir de éstos. Google + ha introducido la geolocalización de la mano de los check-ins.Twitter, por su parte, cerró el año con un nuevo diseño de su web para hacer más atractiva la presencia de los anunciantes. El año pasado, en España los internautas dedicaron uno de cada cinco minutos de su tiempo online a las redes sociales. Un hábito que más que crecer se multiplica. Un fenómeno de última hora, teniendo ya en la mano las cifras de venta de los productos líderes de estas navidades, son las mu- ñecas Monster High: Lagoona Blue, Clawdeen Wolf, Frankie Stein, Draculaura, Cleo de Nile y Ghoolia Yelps. Aunque parece increí- ble, durante los más de cicuenta años de la vida de Barbie es la primera vez que se encuentra con unas hermanitas que la derro- tan. El anunciante, Mattel, se centró casi exclusivamente en las redes sociales para dar a conocer a sus nuevas muñecas. El resul- tado ha sido un éxito. Una vez las tiendas hubieron agotado los productos, estas muñecas comenzaron a cotizarse en Internet a más del doble del su precio. Está claro que no basta con apuntarse a una red y esperar que clientes, usuarios o conocidos pongan ‘me gusta’ al lado de algún comentario. Hay que buscar en la red a las personas que pueden estar interesadas en nuestros productos, sacar de Linkedin toda la información de comerciantes o empresas que nos convengan y, teniendo sus nombres, localizarles por las redes. Finalmente, trabajar cada día en la red. Atraer mediante mensajes publicita- rios bien pensados, ofrecer promociones, crear una buena colec- ción de fotografías, etc. De esta manera conseguiremos conectar con nuestro público objetivo. Pero sin olvidar que el consumidor final, aunque no sea vuestro cliente directo, irá asimilando poco a poco vuestra marca y la tendrá en mejor consideración cuando se la ofrezcan.