La uniformidad escolar al alza /37 A“yapunt, S. A. Con diseños personalizados a la medida de cada colegio Con más de cuarenta años de experiencia, esta firma centra toda su actividad en el diseño y la confección de vestuario para colegiales. Comercializa sus productos a través de tres marcas, Ayapunt, Baby Chic y Al Sur del Sur, que reúnen las siguientes prendas, en punto: jerséis, chaquetas, pulóveres y polos. En confección, pichis, faldas, babys, camisas, pantalones y complementos, como corbatas. Finalmente artículos deportivos, chándales, camisetas, calzones, prendas de baño y otros. Manuel Jesús Márquez, gerente de la firma, nos da su opinión sobre la implantación de la uniformidad en la escuela, tema que ahora se está debatiendo en la calle: “Hay factores que lo aconsejan. En época de crisis resolver el problema de la ropa de los niños con el uso de uniforme significa un ahorro. Por otra parte, los alumnos pasan cada vez más horas en la escuela. Y, especialmente en los colegios públicos, a los padres no les interesa que sus hijos compitan por las marcas con que se visten”. Sobre su método de trabajo el gerente nos informa de que su punto fuerte es la personalización. Cada colegio elige diseño, tipo de tejido como algodón o lana, y las calidades. En el caso de que el cliente no tenga un modelo definido, la empresa presenta sus propuestas. La mayor parte de los clientes de la firma son colegios privados, también sirven a El Corte Inglés y tiendas especializadas, además de exportar a Italia. “Sin embargo, cada vez son más los colegios públicos que se apuntan a la uniformidad”, subraya. El vestuario escolar de Ayapunt se distingue por su excelente calidad. “Trabajamos con las mejores materias pensadas para el uso y el desgaste diarios. Sin embargo, mantenemos unos precios competitivos que interesan a los colegios. Otro de nuestros puntos fuertes es el servicio porque, para nosotros, el vestuario escolar no es una línea de temporada, es nuestra razón de ser. Aunque los meses de mayores ventas son junio y julio, recibimos pedidos desde primeros de año”. La empresa fabrica prendas escolares en un tallaje que va desde los niños de pocos meses hasta la talla 60, sumando un total de 17.000 referencias. Una cifra lógica si se tiene en cuenta que un solo colegio puede demandar más de veinte tipos diferentes de prenda. Para concluir, Manuel Jesús Márquez nos hace esta observación sobre el sector: “Existe una gran fidelización porque los clientes requieren de una garantía de calidad y de buen servicio. Por otra parte, es un segmento que experimenta un crecimiento año tras año”.