78/Noticias 56 Para Comisiones Obreras las faldas son sexistas Air Nostrum (Iberia en tierra) ha cambiado el uniforme de sus empleados eligiendo un diseño con falda para el personal femenino, como ya había hecho en anteriores ocasiones. CCOO opina que llevar faldas es sexista y, además, añade que las del nuevo vestuario son más cortas. La respuesta de la línea aérea no se ha hecho esperar, poniendo de manifiesto que ahora van cinco centímetros por debajo de la rodilla mientras que antes se llevaban por encima. Largos aparte, parece lógico que una empresa que ofrece un servicio público pueda vestir a su personal de la manera que considere conveniente siempre que sea cuidada y digna. Es lógico pensar que habrá mujeres que prefieran faldas y otras que se inclinen por los pantalones, pero si se sometiera a libre elección podría ser que algún azafato se ataviara con faldas, y con todos sus derechos. La igualdad de derechos entre hombre y mujer no puede quedar reducida al uso de una falda. Como podemos observar en plena calle, y en mayor medida en el verano, son muchas las mujeres que optan por vestidos frescos en detrimento de los pantalones. Otro ámbito en el que reina la falda es en las fiestas y las ceremonias, precisamente cuando se cuida más la imagen. Ninguna actriz que recoja un Goya o un Oscar se siente utilizada y sexualmente inferior por llevar vestido y unos tacones de vértigo. Lo cierto es que hay muchas empresas para las que la imagen es esencial que se inclinan por la uniformidad. Es impensable que los usuarios de una línea aérea se sintieran satisfechos si los atendiera un personal heterogéneo, cada cual vestido a su aire, unos enseñando el piercing del ombligo o las tiritas de las bragas y otros el tatuaje del hombro. Pero, tras esta anécdota tan trivial, la pregunta que nos viene a la mente es seria. Con la que está cayendo, ¿no dan los sindicatos con otro tema para debatir? Premio ‘Empresario joven de Valladolid’ a Comercial Ulsa Los hermanos Javier e Ignacio Gómez Salamanca, gerentes de la empresa Comercial Ulsa, han resultado ganadores del XXVII certamen ‘Empresario joven del año en Valladolid’. Este concurso lo desarrolla la Escuela de Empresariales de la Universidad de Valladolid junto con la Junta de Castilla y León y otras organizaciones empresariales. Comercial Ulsa fue fundada en los años 70 por Ulpiano Salamanca, y Javier e Ignacio pertenecen a la tercera generación que toma las riendas de este negocio familiar. La empresa estaba dedicada al suministro industrial y a los equipos de protección, pero, tras un anàlisis del mercado, los hermanos decidieron priorizar los segundos que son la base de su oferta. También le han dado relevancia al vestuario laboral dedicado a los sectores de la industria, limpieza, sanidad, hostelería, cocina, etc. Además de proseguir con los suministros industriales, la firma se ha convertido en un referente en asesoramiento y formación en la prevención de riesgos laborales. Desde Valladolid, la empresa está en capacidad de ofrecer un servicio global en todo el territorio nacional. La estrategia seguida por los hermanos Gómez Salamanca para que Comercial Ulsa haya experimentado un crecimiento exponencial, se ha basado en la diversificación de producto, realizando un especial esfuerzo en los sectores al alza tales como son la prevención laboral, medioambiente -contando con la gama más amplia de productos absorbentes y en el almacenaje de productos peligrosos-, unido a la potenciación del sector del suministro industrial. La apertura de las nuevas instalaciones en el Polígono de San Cristóbal ha supuesto un punto de inflexión para la empresa, al permitirle ampliar la zona de almacenaje y la tienda.