Málaga, entre las ciudades finalistas para ser capital europea de turismo inteligente Málaga aspirará de nuevo para ser elegida Capital Europea de Turismo Inteligente. La ciudad andaluza ha sido seleccionada por segundo año consecutivo como finalista de esta iniciativa de la Unión Europea en la que han participado 35 ciudades de 17 estados miembros de la UE. En la primera edición –celebrada en 2018– Málaga obtuvo el Premio Europeo Turismo Inteligente en la categoría de Accesibilidad tras haber sido la participante con mejor pun- tuación en este ámbito. La capital de la Costa del Sol es la única localidad española que estará presente en el acto en el que se hará pública la capitalidad europea de Turismo Inteligente 2020. El fallo se dará a conocer durante el evento que tendrá lugar en Helsinki, Finlandia, los días 8 y 9 de octubre próximos. El jurado –cuya composición se hará pública en las próximas semanas– elegirá dos ciudades como capitales europeas de Turismo Inteligente 2020. La designación será un reconoci- miento a sus logros como destino turístico en cuatro ámbitos: accesibilidad, sostenibilidad, digitalización y patrimonio cultural y creatividad. Además, el jurado también reconocerá con un Premio Europeo al Turismo Inteligente a cada una de las cuatro ciudades par- ticipantes que hayan obtenido mejor puntuación en cada de estas cuatro categorías. Las otras nueve ciudades finalistas de esta segunda edición de esta competición son Bratislava (Eslovaquia); Breda (Holanda); Bremerhaven (Alemania); Gotemburgo (Suecia); Karlsruhe (Alemania); Ljubljana (Eslovenia); Niza (Francia) Rávena y Turín (Italia). La Capitalidad Europea de Turismo Inteligente es una inicia- tiva del Parlamento Europeo implementada por la Comisión Europea. La competición entre ciudades de los estados miem- bros por obtener este reconocimiento tiene como objetivos la promoción del turismo inteligente en la UE, el desarrollo de un turismo innovador, sostenible e inclusivo, así como facilitar el intercambio de mejores prácticas en el sector turístico. Herramientas e ideas Con más o menos convicción, y con más o menos acierto, 9 las ciudades y localidades españolas están incorporando prácticas y tecnologías que mejoran la gestión de recursos municipales. La sostenibilidad, que debe serlo desde el punto de vista medioambiental, económico y social, no debería ser soslayada por nadie, menos aún por las administraciones públicas. Y en esa asunción de que los recursos son escasos, la transformación de los territorios en entes más inteligentes es ineludible. Muchas administraciones están adoptando tecnologías que, no podemos olvidarlo, no son la panacea ni la solución a todos los problemas que sufren desde grandes ciudades a zonas rurales con una población menguante. El verdadero cambio está en la forma de repensar la relación entre el territorio y sus habitantes, con las administraciones como intermediarias. Y hay casos de éxito que corroboran que ese cambio cultural se está produciendo. Varios de esos ejemplos acuden a las páginas de nuestra revista. Se trata de iniciativas que se desarrollan en localidades medianas, algunas de ellas con poco más de 20.000 habitantes. El municipio zaragozano de Calatayud, Lugo, Murcia o el navarro Valle de Egüés, por citar algunas de una lista que aumenta mes a mes, han puesto en marcha diversos proyectos que permiten que brote el orgullo de hacer las cosas bien y hacerlas por el bien común. Ese es el camino, articular soluciones, poner en marcha proyectos que mejoren la calidad de vida de habitantes y entorno natural, que pongan los mimbres que faciliten un desarrollo económico sostenible, alejándose de visiones cortoplacistas. Y en esta tarea, las administraciones municipales, las más cercanas a la población, desempeñan un papel determinante. En este contexto, Municipalia, el salón que nació en 1981, acude de nuevo a su cita bianual, que en este 2019 tendrá lugar del 22 al 24 de octubre. El recinto ferial de Lérida será el escenario en el que tanto proveedores como administraciones locales puedan poner en común productos, servicios, soluciones, pero, sobre todo, ideas que permitan alcanzar esa inteligencia colectiva que mejore la calidad de vida de las personas. editorial 019