66 La ciudad de Rio de Janeiro es un buen ejemplo del im- pacto de la información y de la interacción de sistemas para avanzar hacia una Smart City. Hasta once centros de control distintos gestionan la infraestructura crítica de la ciudad: electricidad, agua, hidrocarburos, gas, transporte público y tráfico privado, calidad del aire y aeropuertos. La ciudad implementó un sistema SCADA para mejorar la eficiencia en la distribución de agua, un sistema para opti- mizar la distribución energética, una red de cámaras de se- guridad y un sistema de gestión del tránsito. Pero la visión a largo plazo de la ciudad es gozar de los beneficios de una integración de sistemas. Su Centro de Operaciones Inteli- gentes genera un nivel avanzado de información, ofrecien- do una visión holística de las oportunidades de mejora. Hoy, el 50% de la información que recibe el centro provie- Vista panorámica de Río de Janeiro. Foto: Eliza Lana. servicios los ofrecen empresas como Schneider Electric. Esta iniciativa ha sido de ayuda en muchas ciudades, como en Houston, en los Estados Unidos. Allí, Schneider Electric aprovechó un EPC para implementar soluciones de eficiencia energética en 40 edificios municipales, unas mejoras infraestructurales que no solo redujeron las emi- siones de carbono sino que también ahorraron tres millo- nes de dólares anuales en agua y energía. Asegurar la colaboración, último paso Del mismo modo que una ciudad es la suma de sus par- tes, un desarrollo efectivo del mapa de ruta hacia la Smart City requiere la colaboración de todos sus públicos de in- terés. Las Smart Cities más fuertes serán aquellas en las que todos los actores dejen a un lado competitividad em- presarial y diferencias políticas para llegar a las mejores EFICIENCIA ENERGÉTICA ne de sistemas de Schneider Electric. Cuarto paso, buscando la innovación Ante el colapso de los mercados, no resulta sorprendente que muchas ciudades tengan problemas de presupuesto. Pero muchas ciudades inteligentes están trabajando con modelos innovadores para obtener unas infraestructuras más eficientes a pesar de su presupuesto limitado. Una de las estrategias más efectivas es utilizar contratos de ahorro energético (EPCs por sus siglas del inglés Energy Performance Contracting), que en muchos países permiten financiar Smart Cities gracias al ahorro energé- tico que generan. El capital inicial de inversión en este tipo de contratos viene de la comunidad financiera y los soluciones. La digitalización de nuestro mundo y la consiguiente nece- sidad de una infraestructura de IT robusta ha llevado a la convergencia entre las industrias energéticas y tecnológicas. Schneider Electric trabaja con líderes tecnológicos como Cisco, Accenture, IBM y Microsoft para combinar fortalezas y ofrecer una eficiencia sin precedentes. En definitiva, las ciudades se enfrentan a retos urbanos de una escala cada vez mayor. Nuestras poblaciones cre- cen rápidamente. La presión en las infraestructuras au- mentará. La urgencia para reducir el impacto de estas urbes en el medioambiente será cada vez más urgente. El momento de actuar es ahora. I tecnología