43 Esta globalización ha pasado de ser unipolar en los años 90, en la que las grandes regiones económicas (Unión Eu- ropea, Japón, China e India) giraban en torno a EE UU, a una visión mucho más compleja a nivel geopolítico, con una red en la que interactúan seis grandes áreas: Norte- américa, Unión Europea, Oriente Medio, Asia, Sudaméri- ca y África. En esta nueva visión las ciudades también ganan prota- gonismo, ya no tienen un papel secundario en la toma de decisiones, son ciudades-estado que se interrelacionan con el mundo de una forma completamente diferente a como lo hacían hasta ahora. Se trata de auténticos archi- piélagos urbanos, con más poder que muchos de los pa- íses que hay en el mundo (hay claros ejemplos de alcaldes que han acabado siendo presidentes del gobier- no en sus países). Hablamos de grandes ciudades como Londres, Boston, Sao Paulo, Shangai, Nueva Delhi, Mom- bai Osaka... En este nuevo paisaje, los ciudadanos se re- sentido es sintomático apreciar cómo durante los últimos años han visto crecer exponencialmente sus inversiones en infraestructuras (transportes, telecomunicaciones, etc.) mientras que el gasto en Defensa se ha mantenido en valores similares. Mientras que antiguamente prima- ba quién poseía el mayor ejército o contaba con el arma- mento más sofisticado, ahora lo importante es tener el mayor peso en la economía internacional, para lo que es imprescindible contar con buenas infraestructuras. La región donde se está apreciando claramente esta ten- dencia es en Asia, donde según las previsiones apuntadas por Parag Khanna, para 2025, de las 37 megaciudades que existirán en el mundo, 22 estarán en aquel continente (el proyecto Delta Pearl River, por ejemplo, unirá en una misma área nueve ciudades que suman el 10% de la eco- nomía china). No quiso finalizar Parag Khenna su ponencia sin antes conocen más como habitantes de estas grandes urbes que de los propios países que las acogen. Son, en resu- men, grandes núcleos urbanos relevantes por sí mismos. Estos archipiélagos urbanos compiten entre ellos para ganar terreno en un mundo cada vez más globalizado y en este advertir sobre los cambios que se están dando en los flu- jos migratorios (del oeste al este y del norte al sur) y en cómo éstos van a afectar a la configuración de las ciuda- des (mientras que en 1960 había en el mundo 70 millo- nes de expatriados en 2013 ya hablábamos de 250 millones).I smart city expo world congress