INSTALACIONES ELÉCTRICAS EFICIENTES 62 centrado mucho ya en la calidad y no tanto en la dispo- nibilidad, puesto que los grandes cortes de suministro eléctrico de otros tiempos han dado paso a problemas más transitorios como subidas y bajadas de tensión o microcortes, no es menos cierto que los equipos de cli- matización son sistemas muy sensibles a estos defectos, ya sea afectando a su electrónica o elementos más mecá- nicos como compresores. Las pymes pueden enfrentarse a simples defectos de alimentación muy puntuales, pero que derivan en paradas completas y continuadas de sus sistemas HVAC con necesidad de actuación para el rearme, y que irremediablemente impactarán en el confort de empleados y clientes. Pero si la falta de cli- matización puede ser incomoda hasta el punto de no poder abrir un negocio, u obtener malas valoraciones de nuestros clientes, también hay que tener en cuenta que puede conllevar costes significativos innecesarios. Una parada prolongada de un sistema que mantiene controlada y estable 24/7 una temperatura/humedad de un negocio, puede conllevar un sobrecoste importante al volver a arrancar el sistema y llevarlo de nuevo a punto de consigna. Por ello, hay que evitar la falta instantánea de suministro eléctrico con soluciones SAI. El paradigma del cambio de la predicción a la prevención Un aspecto que a la mayoría escapa, y que debe ser el estandarte de los electricistas e instaladores en la fidelización de sus clientes, es el cambio necesario de una actuación preventiva a una aproximación a los problemas de sus clientes más predictiva. Y para ello entra en acción las propuestas de conectividad y ana- lítica de las soluciones planteadas. Un SAI per se será capaz de dar continuidad de servicio a una instalación (dentro de su periodo de vigencia y vida útil optima), mientras que un equipo SAI conectado y monitorizado asegurará esa continuidad de por vida, además de anti- cipar posibles incidencias y evoluciones que podrían implementarse para mejorar la eficiencia del propio negocio. Ejemplos claros pueden ser: la reclamación a compañía de una mejor calidad de suministro en base a registro de datos, deslastrado de cargas para alargar la continuidad de suministro del SAI en caso de corte prolongado, desconexión programada o forzada de cargas innecesarias por temas de eficiencia y aho- rro, detección de consumos anómalos en las cargas y prevenir su mal funcionamiento, anticipación en el mantenimiento preventivo tanto de cargas como del propio SAI en función de datos recogido. En resumen, las pymes no pueden permitirse el lujo de estar fuera de servicio, ni siquiera durante un corto período de tiempo. Y menos cuando están intentando recuperarse de un confinamiento que ha puesto en duda su supervivencia. El impacto negativo que tendría en sus ingresos, operaciones en general y en la satisfac- ción del cliente sería difícil de asumir para la mayoría. No hay duda, la continuidad del negocio es una preo- cupación real. Un corte de energía no puede paralizar las operaciones de una pyme y, en un escenario como este, los electricistas e instaladores tienen un papel pedagógico fundamental: explicar a sus clientes que asegurar y proteger los componentes más críticos de su negocio con soluciones SAI reduce el riesgo de interrupción de sus operaciones.•