34 La industria del frío ante la próxima revolución tecnológica En la industria del frío todavía se ha hablado poco sobre la Cuarta Revolución Industrial. Y, sin embargo, la reconversión de nuestros negocios en industrias 4.0 es una necesidad y un reto para asegurar el futuro de los mismos. También, afortunadamente, comienza a ser una realidad en muchos casos. Los elementos que configuran una Industria 4.0 son nume- rosos pero, en el sector de la refrigeración industrial y comercial, hay una palabra que se impone sobre las demás: la conectividad. El poder de los datos, del tan conocido Big Data, es inmenso. En nuestro sector, una vez producida la electronifica- ción de las plantas frigoríficas, su utilidad principal se deriva del control en tiempo real de las instalaciones, lo que facilita un mejor mantenimiento y permite alcanzar niveles óptimos de eficiencia energética. La tecnología se presenta, de este modo, como la gran aliada de algunos de los grandes retos de la industria de la refrige- ración del siglo XXI. La refrigeración automatizada DOSSIER REFRIGERACIÓN Félix Sanz, adjunto a la Gerencia Aefyt La recogida de datos ha existido siempre en las instalaciones frigoríficas. Es necesaria para controlar que los parámetros de temperatura se ajusten a las condiciones estipuladas en función del uso de la instalación y de las condiciones climatológicas externas, entre otros, y que no haya alteraciones potencialmente peligro- sas. También es precisa para el control de posibles fugas y de los índices de consumo energético. Si vamos más al detalle, posibilita el control remoto de válvulas, compresores, cuadros eléctricos..., en definitiva, de todos y cada uno de los elementos que configuran la instalación. Pasar del control manual al control automático significa dotar a la instalación de la capacidad de realizar una correcta regulación de forma automática con el objetivo de mantenerla siempre próxima a los parámetros de funcionamiento, fiabilidad y eficiencia ener- gética óptimos. Si damos un paso adelante, el funcionamiento correcto se traduce en rentabilidad económica para el cliente y para la propia empresa instaladora o mantenedora. Y, en definitiva, en un argumento de venta para el fabricante. La automatización permite monitorizar en tiempo real el funcio- namiento de la instalación y recibir cualquier alerta que indique una anomalía en el mismo momento en que ésta se produce, lo que permite solucionarla en el menor tiempo posible. Este control se realiza en remoto, lo que posibilita, además, monitorizar a la vez varias instalaciones desde un mismo punto físico. La era del Big Data La conectividad y el control remoto, siendo importantes, no son las funciones más revolucionarias en el contexto de la Industria 4.0. El verdadero reto consiste en la gestión de la gran multitud de datos que los sistemas informáticos pueden proporcionar: las esta- dísticas, el histórico de la evolución de los parámetros, las gráficas detalladas del funcionamiento de cada uno de los componentes, los índices de rendimiento energético y un largo etcétera. La inclu- sión de la realidad aumentada con la utilización de simuladores de forma simultánea a la adquisición de datos, permitirán nuevos niveles de aproximación a los parámetros óptimos. Según se reconoció en la Sesión Plenaria ‘La refrigeración industrial. Evolución en técnicas de ahorro de energía’ del último Tecnofrío 2018, uno de los grandes retos al que se enfrenta la industria del frío es contar con profesionales preparados para interpretar estos datos y convertirlos en información y conocimiento que sirva de apoyo tanto a los desarrollos técnicos del portfolio de producto de la compañía como al crecimiento del negocio.