Figura 1. Esquema de sistemas de la fábrica a auditar. En cuanto al uso de la energía, la mayor parte se destina a la caldera. El suministro eléctrico abastece a varios sistemas, entre los que des- tacan la maquinaria del proceso productivo, con un 73% del consumo eléctrico, y el sistema neumático, con un 18%. El resto de sistemas que se alimentan de electricidad presentan consumos inferiores al 2%, excepto la iluminación, que representa casi un 5%. ( gura 3) La fábrica objeto de esta auditoría tiene un alto nivel de automati- zación del proceso productivo. Éste consiste en grandes máquinas compuestas de un alto número de equipos, los cuales trabajan de forma autónoma y automática a partir de las indicaciones generales de los operarios sobre el panel de control. Por otro lado, gran parte del transporte interno está automatizado, y los productos intermedios del proceso, así como elementos a desechar, se mueven por cintas de transporte accionadas a través de sensores. A lo largo de la vida de la fábrica se han ido incorporando medidas de • e ciencia energética sobre los diferentes sistemas, lo que hace contar actualmente a la planta con un nivel bueno de optimización energética. • De dichas medidas se destacan las siguientes: • La caldera de vapor dispone de un sistema de recuperación del • calor de los gases de la combustión para precalentar el agua de alimentación de la misma. • Los grandes motores de las máquinas para el proceso tienen varia- • dores de frecuencia, y parte de los de menor potencia también. Figura 2. Balance energético por tipo de suministros. La mayor parte de pasillos de rodillos están mecanizados y auto- matizados para funcionar cuando detecten la carga. La iluminación de la nave se sustituyó por campanas de tecno- logía LED. Uno de los compresores del sistema neumático es modulante, y adapta su nivel de potencia en función de las necesidades del proceso. Dicha regulación se hace de forma automática. La refrigeración de la nave se hace con enfriadores adiabáticos, los cuales tienen un consumo energético muy reducido. Figura 3. Balance energético (izq.) y eléctrico (dcha.) global por usos. DOSSIER: AUDITORÍAS ENERGÉTICAS >>33