Hacia un futuro sostenible En un acto de presentación celebrado en Madrid el pasado 9 de abril, la Fundación Renovables y la Plataforma por un Nuevo Modelo Energético han expuesto cuáles son las medidas propuestas, fruto de experiencias municipales de éxito en ma- teria energética y de trabajos de fondo como el Ciudades con Futuro de la Fundación Renova- bles, y han invitado a todas las formaciones políti- cas a manifestar durante el acto su nivel de com- promiso con un futuro de Cero Emisiones para sus municipios que además de una responsabili- dad y progreso ambiental es una oportunidad car- gada de futuro en términos sociales y económicos para el municipio. En el evento participaron para refrendar su adhesión diferentes partidos como Ciudadanos (Ismael Ras- toll), Compromís (Joan Baldoví), CHA (Chusé Inazio Felices), Equo (Alejandro Sánchez), ICV (Josep Pé- rez Moya), IU (Ascensión de las Heras), Izquierda Independiente-Iniciativa por San Sebastián de los Reyes (Rubén Holguera), Podemos (Luis Alegre Za- honero), PSOE (Pilar Lucio) y UPyD (Carlos Martí- nez Gorriarán). Además de los presentes, los si- guientes partidos, han firmado ya el Manifiesto y adquirido el compromiso de llevar a cabo políticas energéticas social y ambientalmente sostenibles en toda su organización: Més per Menorca y Partit dels Socialistes de Catalunya. “Ponemos sobre la mesa facilidades para que los municipios den pasos ambiciosos en renovables y ahorro energético. Pedimos un compromiso y hare- mos el seguimiento después de las elecciones”, ha declarado Jorge Morales de Labra, Vicepresidente de la Fundación Renovables, durante el acto de pre- sentación de las medidas. “Necesitamos voluntad política para el cambio de modelo energético. La ciudadanía está haciendo presión y es el momento de que los partidos políti- cos escuchen las propuestas y se comprometan a ponerlas en marcha”, ha añadido María José Rome- ro, Coordinadora de la Plataforma por un Nuevo Modelo energético. Según ambas organizaciones, las administracio- nes municipales no deben ni pueden permanecer ajenas al inevitable cambio de un sector de eleva- do impacto social y ambiental como el energético. Todas las administraciones públicas, en particular