38 Stand de Royse/Shell en el MMH 2019. torización de las condiciones del aceite que se denomina 'Remote Sense'. Trabajamos con un programa de toma de muestras 'Shell LubeAnalyst' que luego se envían a un laboratorio para poder ver cuál es la condi- ción del aceite y determinar si es necesario cambiarlo. Y en esta feria estamos presentando un nuevo sistema de monitori- zación remota de la condición del aceite, 'Remote Sense', mediante la instalación de sensores. Esa información se almacena de forma online en la nube para que esté disponible en todo momento. Es una fórmula que ya está implantada en otros sectores y que va a tener también cabida en minería. Al igual que se puede medir de forma remota la presión de un neumá- tico, se pueden identificar diversos parámetros en un aceite de forma complementaria a la tradicional, mediante la que el operario tome una muestra, que esa muestra se envíe al laboratorio, que éste lo analice y que el operario después de horas de espera tenga una respuesta. Al final estamos hablando de equipos que pueden estar trabajando durante 24 horas al día y donde tener una información actualizada puede ser de gran ayuda. ¿Tienen algún estudio comparativo donde se puedan ver claramente los ahorros de coste que puede obtener un cliente usando el lubricante adecuado para su aplicación? Sí, esto es una práctica habitual para nosotros. Pongo el ejemplo de un aceite de motor. Lo habitual es que el cliente cambie el aceite por ejemplo cada 250 horas. Lo que nosotros le podemos proponer es usar un aceite mucho más avanzado y a partir de ahí determinar, en base a un programa de toma de muestras, que el cliente mantenga el aceite con mejores condiciones tras esas 250 horas, o bien que pueda extender el cambio de aceite a un intervalo más largo, de 400 ó 500 horas, reduciendo con ello el consumo a la mitad. La medición del coste ya no es en base a los euros/litro sino a los euros/litro/hora. ¿Hay algún caso de éxito significativo de los lubricantes Shell en el sec- tor de la minería que le gustaría destacar? Disponemos de muchos casos de éxito, como, por ejemplo, tenemos clientes que han ahorrado 170.000€ anuales por la utilización de Shell Omala S4 GXV para sus reductores junto con la utilización del programa Shell LubeAnalyst. ¿Quiere añadir alguna cosa más antes de dar por terminada la entrevista? Me gustaría añadir que somos la única compañía que está ofreciendo lubricantes a partir de gas natural (el aceite base es un 90% del pro- ducto ya formulado), y que nuestra propuesta de valor pasa por el desarrollo de nuevos servicios y, sobre todo, por acercarnos al cliente para identificar sus verdaderas necesidades y, con ello, darle la solu- ción que necesita con el propósito de seguir siendo una referencia en el sector de la minería. • 38<< inGEOpres Como proveedores de soluciones a clientes que trabajan en minas..., ¿considera que hay una reactivación de este sector en España? Es difícil prever qué horizontes puede tener en el futuro, pero desde Shell estamos preparados para poder ofrecer a nuestros clientes nuestra experiencia y todas las soluciones necesarias en materia de lubricación para el desarrollo de su actividad. ¿Llevan solo el mercado español o también Portugal? Únicamente España, si bien el grupo Shell opera en 70 países diferen- tes a nivel mundial, incluido Portugal. De todas las aplicaciones y sectores en los que están presentes los lu- bricantes Shell, ¿qué porcentaje puede ir dirigido a la minería? Como dice, Lubricantes Shell está presente en multitud de sectores y muchos de los productos de la gama Shell como la gama Rimula (aceites de motor), Tellus (hidráulicos), Omala (engranajes) o Gadus (grasas) tienen aplicación en minería. ¿Aparte de la minería también van al sector de la maquinaria de obra pública? Sí, desde Shell ofrecemos productos para los sectores de construc- ción y obra pública, igual que para minería, y tenemos una amplia gama de servicios como los que citaba anteriormente. ¿Hay alguna novedad importante en su gama? Nuestra principal novedad es la tecnología de gas natural con la que se producen los aceites base de todos los productos de nuestra gama, ya que hace que estén más libres de impurezas y, gracias a ello, podemos crear un producto mucho más limpio con el que proteger el motor. En este sentido, nosotros en lugar de ofrecer un catálogo de productos para que el cliente seleccione, lo que tratamos es de acercarnos al usuario en base a nuestra experiencia, identificar qué necesidades tiene de lubricación en cada punto de su planta o maqui- naria y, a partir de ahí, ofrecerle el producto más adecuado para conseguir sus objetivos: fiabilidad de los equipos, tiempos mínimos de parada, menores costes. Entiendo entonces que son productos hechos a la medida del cliente... Hacemos una auditoría de lubricación donde nuestros técnicos se desplazan a la planta y vamos viendo punto a punto qué necesidades tiene, identificando aplicaciones críticas y a partir de ahí hacemos una propuesta de valor, que puede incluir incluso la comparativa con otro producto que esté ya usando el cliente. Para ello tenemos también cen- tros tecnológicos de I+D en Europa donde podemos hacer los ensayos. Además, estamos comenzando a ofrecer un nuevo servicio de moni-