Vehículos aéreos DRONES Los VANT ofrecen una forma segura de recopilar información detallada en áreas remotas de difícil acceso que sean de interés geológico para su exploración La exploración minera es ideal para un VANT por diversas razones. Los vuelos tripulados en zonas remotas son peli- grosos y requieren importantes recursos que suponen un gran coste en lo que respecta a mecánica, depósitos de carburante. etc. Los VANT son más fáciles de lanzar, movilizar, con gurar y reabastecer. Además, los VANT pueden volar en la mayoría de condiciones meteorológicas y durante la noche, lo que supone un aumento importante de la productividad frente a los estudios aéreos convencionales. En un estudio magnético, una persona cubre en un día entre 10 y 15 km lineales. Para cubrir una red de 100 km lineales, tardaría aproximadamente 10 días, además de todo el gasto en alimentación, etc. Un dron puede cubrir 100 km lineales en menos de un día. Además, los problemas de seguridad personal de una persona aislada en la montaña durante 10 días son una verdadera preocupación. Con un dron se mitiga gran parte del riesgo asociado a un estudio de este tipo. Aunque el dron vuela más alto y, por tanto, se reduce ligera- mente la potencia de la señal, la densidad de corte de los datos, tanto a lo largo de una línea como entre líneas distanciadas entre sí menos de 10 m, compensa con creces los escasos datos que pueden obtenerse cuando se trabaja desde tierra, y que también son susceptibles de captar ruido de la super cie, como rocas y temblores del operario. 1. Introducción Desde la década de los 40 se han instalado o montado mag- netómetros en plataformas aéreas para la exploración de recursos. Los mapas del campo magnético de la tierra pueden iluminar la geología estructural relacionada con contactos de rocas, cuerpos intrusivos, cuencas y roca madre. Los contrastes de susceptibilidad asociados con cantidades importantes de magnetita en el subsuelo pueden identi car áreas que pueden ser buenas candidatas para albergar depósitos de minerales de metales preciosos o tubos de diamantes. Las anomalías mag- néticas existentes asociadas con mineralizaciones conocidas se extrapolan con frecuencia para ampliar los patrones de perfora- ción y las actividades mineras en nuevas áreas. Normalmente, después de un estudio aéreo, se requiere un tra- bajo terrestre para un estudio más pormenorizado de cualquier anomalía detectada. Todo este proceso implica muchos recursos materiales, humanos y logísticos. Por nuestra parte, queríamos buscar un enfoque innovador, bene ciarnos de todos los avances tecnológicos existentes en lo que respecta a sensores magnéticos y vehículos aéreos no tri- pulados para proporcionar una mejor herramienta para estudios aéreos geofísicos. La tecnología VANT ha mejorado notablemente en los últimos cinco años. Actualmente existen aplicaciones para VANT de control remoto so sticadas y muy rentables, con tecnología del tipo de fotografía y Lidar en minería, entre otras. Aunque los pioneros en las aplicaciones de geociencia fueron lentos en sus avances, se espera que los sistemas de magnetómetro insta- no tripulados en ciencias de la tierra Los VANT son aviones sin piloto que vuelan en misiones militares, policiales y comerciales para distintas tareas. Son relativamente rápidos y económicos, recopilan una gran cantidad de datos y pueden equiparse con sensores muy variados, desde cámaras normales a cámaras de in- frarrojos y, ahora, también magnetómetros. Controlados inicialmente mediante aplicaciones militares, las plata- formas, como helicópteros y aviones, han evolucionado signi cativamente en los últimos diez años con nuevas mejoras tecnológicas, e ciencia, alcance, tamaño y car- ga útil. Aunque estos desarrollos han quedado fuera del sector comercial, esta tendencia está cambiando con el descubrimiento de nuevas aplicaciones comerciales. > Geraldo Pinto. GEM Systems, Canadá 46<< inG E Opres