Erosión Una propuesta de umbrales para valorar la erosión de taludes en obras lineales A partir de los valores de pérdida de suelos propuestos por FAO-PNUMA- UNESCO, el artículo presenta una propuesta de clasificación cualitativa de la erosión que proporcione límites admisibles —dentro del orden de magnitud usual en taludes de obras lineales— que permita superar la visión agronómica que se ha dado tradicionalmente a la erosión, a fin de disponer de una herramienta que nos permita valorar la gravedad de la pérdida de suelo de un talud en una obra lineal. Palabras clave: CLASIFICACIÓN, EROSIÓN, GRAVEDAD, ÍNDICE, PENDIENTE, PÉRDIDA DE SUELO, TALUD, UMBRAL. ✍ David HERNANDO ARROBA (*), I. C.C. y P. Manuel G. ROMANA GARCIA (*), Dr. Ing. C.C. y P. (*) E.T.S.I.C.C.P de Madrid El interés por la estimación de la erosión en los taludes de las obras lineales surge como consecuencia de la pérdida de la capa edáfica, desprendimientos de material, eventuales inva- siones de la calzada, formación de cárcavas, deslizamientos de piel y aterramiento de los elementos de desagüe y drenaje, que aumentan el coste de conservación de las infraestructuras y que pueden convertir un mal menor en un problema de importancia superior. Tradicionalmente, la erosión ha sido estudiada a través de la ecua- ción universal de pérdida de suelo (Universal Soil Loss Equation, USLE) publicada inicialmente en 1961 por el Servicio de Investigación de Agri- cultura de los Estados Unidos (US Agricultural Research Service). En el caso particular de los taludes de obras lineales, se emplea la ecuación adaptada por Israelsen et al. en 1980, ecuación simplificada y extendi- da para pendientes de hasta el 100% (1H:1V). Para valorar cualitativamente la pérdida de suelo determinada de acuerdo con la ecuación adaptada de Israelsen et al (1980) es normal recurrir a los umbrales de erosión para suelos agronómicos estableci- dos por las organizaciones FAO-PNUMA-UNESCO en 1980. Sin em- bargo, estos valores resultan inadecuados en el caso de los taludes de obras lineales, donde las elevadas pendientes originan pérdidas de sue- lo muy superiores a los límites admisibles para un suelo agronómico. Por esta razón, es necesario establecer una nueva clasificación cua- litativa de la erosión que proporcione límites admisibles dentro del orden de magnitud usual en taludes de obras lineales. Romana (1997) define la erosión en taludes de obras lineales como un fenómeno que abarca áreas reducidas y de elevada pendiente tra- tándose, generalmente, de superficies desnudas que presentan una for- ma de fallo superficial y progresiva (en contraposición al fallo masivo y súbito). En los últimos años se han desarrollado principalmente dos tenden- cias en el estudio de la erosión. En primer lugar, son numerosos los es- tudios orientados hacia la elaboración de mapas de estados erosivos basados en sistemas de información geográfica (GIS) que permiten vi- sualizar fácilmente aquéllas zonas potencialmente más sensibles a la erosión. Una segunda tendencia está basada en el estudio de las varia- bles climáticas a nivel regional con el propósito de desarrollar índices de erosión que resulten fácilmente obtenibles y correlacionables con el ín- dice de erosión pluvial desarrollado por Wischmeier en 1959, sin nece- sidad de recurrir a registros continuados de pluviógrafos, lo que supo- ne un importante avance en la aplicación de la ecuación universal de pérdida de suelo. En el caso de España, ambos estudios se han desa- rrollado principalmente en el este y el sur del territorio (Jordán y Bellifan- te, 2000; Pascual et al. 2001; Gallego et al, 2002; Rodríguez et al., 2004; Rodríguez, 2007). Además, el estudio de la erosión debe tener en cuenta tanto cam- bios como hiperciclos climáticos, de tal forma que permita estimar la pérdida de suelo para un determinado período de años venideros. Objetivos Los objetivos que se pretenden alcanzar con el presente documento son los siguientes: • Desarrollar una metodología que permita estudiar la pérdida de suelo en una zona puntual como es el talud de una obra lineal, a través de la adaptación que Israelsen et al. (1980) hicieron de la ecuación universal de pérdida de suelo. • Proponer una clasificación que permita valorar cuantitativa y cuali- tativamente la pérdida de suelo en un talud de una obra lineal. Estado del arte Estimación de la pérdida de suelo La ecuación universal de pérdida de suelo (Universal Soil Loss Equation, USLE) es fruto de más de veinte años de investigación durante los cua- les se fueron añadiendo parámetros progresivamente, hasta que a fina- les de la década de 1950 el Servicio de Investigación de Agricultura de los Estados Unidos (US Agricultural Research Service) desarrolla la ver- sión modificada definitiva, publicada inicialmente en 1961 (Wischmeier, W.H. y Smith, D.D. (1961): A universal equation for predicting rainfall-ero- sion losses – An aid to conservation farming in humid regions; citado por Laflen y Moldenhauer, 2003) y posteriormente en 1965 (Wischmeier y Smith, 1965) y 1978 (Wischmeier y Smith, 1978). El objetivo que se pretendía lograr con dicha ecuación era estimar la pérdida de suelo originada en las grandes llanuras de los cinturones de trigo y maíz norteamericanos situadas al este de las Montañas Rocosas. Por lo tanto, se trataba de una visión agronómica del problema y, por extensión, del estudio de grandes áreas de terreno de baja pendiente (20% ó 5H:1V) y alta erosionabilidad, al menos durante un cierto perío- do del año durante el cual el terreno quedaba desnudo. La ecuación universal de pérdida de suelo presenta la siguiente es- tructura: Donde cada uno de los parámetros de la ecuación representa lo si- guiente: . -1. -1 ). • R, índice de erosión pluvial (hJ.cm.m-2.h-1.año-1 ó MJ.cm.ha-1 • A, tasa de pérdida de suelo por unidad de superficie (t ha año .h-1.año-1). • K, parámetro de erosionabilidad del suelo o erodabilidad (t.m2.h.ha-1.hJ-1.cm-1 ó t.h.MJ-1.cm-1). • L, parámetro de longitud potencial de reguero (adimensional). 191 28