Salud LAS MICOBACTERIAS EMULSIONADAS EN ACEITE DE OLIVA SON CAPACES DE ACTIVAR MÁS EL SISTEMA INMUNOLÓGICO QUE CUANDO ESTÁN EN SOLUCIONES ACUOSAS EL PAPEL DEL ACEITE DE OLIVA EN EL TRATAMIENTO DEL CÁNCER DE VEJIGA / EstelaNogueraOrtegayEstherJuliánGómez,DepartamentodeGenéticayMicrobiología,UniversitatAutónomadeBarcelona España registra una de las incidencias más altas del mundo de cáncer de vejiga. La mayoría de tumores vesicales son diagnosticados cuando se encuentran en sus fases iniciales. En estos casos, para evitar la aparición de nuevos tumores, después de la extracción quirúrgica de las células tumorales se realiza un tratamiento con inmunoterapia, que consiste en la administración de una bacteria dentro de la vejiga, concretamente una micobacteria. Las micobacterias se caracterizan por tener una envuelta lipídica que dificulta su administración en soluciones acuosas en los pacientes con cáncer. Sin embargo, la administración de estas micobacterias en una emulsión en aceite de oliva se ha demostrado en estudios preclínicos que mejora su capacidad antitumoral. 70 El cáncer de vejiga, tras los tumores de pulmón, próstata y colorrectales, es el cuarto cáncer en incidencia en varones españoles. Según los últi- mos datos publicados por la Organización Mundial de la Salud, España registra una de las incidencias más altas del mundo en este tipo de cáncer. Se diag- nosticaron 13.789 casos nuevos en 2012, 11.584 de los cuales fueron en hombres y 2.205 en mujeres (Globocan: Bladder cancer incidence and mortality, 2012). El principal factor de riesgo del cáncer de vejiga es el consumo de tabaco. Según la Asociación Española Contra el Cáncer, un 70-75% de los casos diagnosticados son atribuibles al tabaco (Asociación Española Contra el Cáncer, 2014). El cáncer vesical, y en general todos los cánceres, tienen su origen en una o diversas disfunciones en los mecanismos de control del crecimiento celular. Consecuentemente, las células empiezan a crecer des- controladamente y sin límites, lo cual acaba generando una acumulación de células que acaba siendo un tumor. La mayoría de tumores vesicales son diagnosticados cuando se encuentran en sus fases iniciales, es decir, cuando los tumores se encuentran únicamente en las capas más superficiales de la vejiga, las más cercanas al lumen, donde se almacena la orina (ver figura 1a). Sólo un pequeño porcentaje de tumores se diagnostican en estadios más invasivos, en los que el tumor ocupa capas más internas de la vejiga (ver figura 1a).