Figura 2. Evolución del (A y B) potencial hídrico foliar al mediodía (PHF), (C y D) conductancia estomática (gs), (E y F) fotosíntesis neta (An), (G y H) transpiración (E) e (I y J) concentración de CO2 intracelular (Ci) durante el experimento de sequía en los años 2015 y 2016. Las barras de error representan el error estándar de la media. *: diferencias significativas (p = 0,05) entre tratamientos para cada punto temporal del experimento según la prueba t de Student; $: diferencias significativas (p = 0,05) entre cultivares para cada punto temporal del experimento según la prueba t de Student. d = día; R = recuperación. FRUTICULTURA 21 respectivamente (Figura 1). Las diferencias en la demanda hídrica de cada cultivar, basado en sus distintas fechas de maduración de fruto, y el grado de adaptación al ambiente estresante de la zona del experimento, podrían explicar las diferencias encontradas en el CHS. 'Ufo-3' madura un mes antes que 'Fergold', por tanto, el con- sumo de agua por parte de 'Ufo-3' sería menor que en 'Fergold' en el momento del experimento. Como consecuencia, el descenso en CHS sería menos pronunciado en 'Fergold'. La restauración del riego en los árboles estresados aumentó el CHS en ambos años (Figura 1). Asimismo, el PHF de los árboles estresa- dos alcanzó valores semejantes a los registrados por su control en ambos años (Figura 2A y B). Una tendencia similar de disminución en los valores de PHF también ha sido descrita en estudios anterio- res llevados a cabo tanto en almendro, como en otros híbridos de Prunus (Isaakidis et al., 2004; Yadollahi et al., 2011), y también en melocotonero sobre 'GF-677' (Mellisho et al., 2011).