ALCACHOFA Figura 4. Propiedades químicas del suelo enmendado con fertilizantes a base a planta (alfalfa, AM)y de origen animal (sangre BM; estiércol de pollo, CM, y harina de pescado, FM) en el cultivo de la alcachofa (cv. 12-179). September de 2014 hasta julio de 2016. Figura 5. Tasa de aplicación y coste total de los fertilizantes de origen vegetal, a base de alfalfa (AM) y de origen animal, harina de sangre (BM), estiércol de pollo (CM) y harina de pescado (FM). aumentó significativamente los indicadores de salud del suelo (% de materia orgánica y CO2 de respiración). Como resultado, la calidad de la alcachofa (ácido clorogénico y cinarina) del cultivo orgánico fue superior a la del sistema de cultivo convencional. En general, y considerando un corto plazo (2 años), la agricultura orgánica no parece una práctica apropiada (en comparación con la convencional) para los agricultores, específicamente, cuando la preocupación principal es el alto rendimiento y los costes laborales y de insumos (fertilizantes). La enmienda del suelo con fertilizantes de origen vegetal (harina de alfalfa) produjo un rendimiento comercial más bajo en compa- ración con los fertilizantes de origen animal (harina de pescado, harina de sangre y estiércol de pollo). Además, el coste total (por ha) de la harina de alfalfa fue notablemente más alto que el de los fertilizantes de origen animal. Sin embargo, el fertilizante a base de plantas (harina de alfalfa) aumentó significativamente el % de materia orgánica del suelo y el CO2 de la respiración y la calidad de la cabeza (cinarina y ácido clorogénico) en comparación con los fertilizantes de origen animal.• 21 a lo esperado, la EC del suelo cuando se usó la harina de alfalfa fue ligeramente más alta que cuando se aplicaron los fertilizantes de estiércol de pollo y harina de pescado (Figura 4). Li-Xian y otros. (2007) encontraron un riesgo potencial de salinización secunda- ria del suelo cuando se aplican altas tasas de estiércol de pollo y paloma. Esto se debe a que normalmente se agrega sal externa a la dieta animal para aumentar la productividad y prevenir trastornos minerales (Diacono y Montemurro, 2015). El coste total es un factor clave para seleccionar los fertilizantes orgánicos comerciales. En este estudio, el coste del fertilizante de alfalfa (fertilizante anual por ha-1) fue mayor que el de los fer- tilizantes de origen animal (Figura 5). Basado en una unidad de N tendríamos: 74 dólares kg-1 para el fertilizante de alfalfa, 31 dólares kg-1 para el de sangre, 28 dólares kg-1 para el estiércol de pollo y 44 dólares kg-1 para la harina de pescado. En consecuen- cia, el coste total (promedio anual por ha) aplicado es muy alto y equivale a 8,140 dólares para el fertilizante de alfalfa, 3,410 para el de sangre, 3,080 para el de estiércol de pollo y 4,840 dólares por hectárea para el de harina de pescado. En general, el fertilizante a base de plantas (alfalfa) puede ser la mejor decisión para mejorar la calidad del suelo y de la alcachofa, pero no es la opción ideal para los agricultores orgánicos, cuando el rendimiento y el coste de los fertilizantes son la principal preocupación. Conclusiones El sistema de cultivo convencional tuvo mayor rendimiento de alcachofa que los orgánicos en todo el período de estudio y sobre todos cultivares estudiados. Sin embargo, la agricultura orgánica Para consultar los datos bibliográficos del artículo, visite: www.interempresas.net/A234189