17 INJERTOS Introducción El injerto es una alternativa ecológica al uso de fumigantes de suelo para el control de plagas y enfermedades, así como para el complejo conocido como cansancio del suelo. También puede ser empleado contra agentes abió- ticos como salinidad, sequía, temperatura, encharcamien- to. Puede influir sobre el nivel de presencia de los fitoquímicos (está descrito la reducción en 1% de nicotina en plantas de tabaco injertadas sobre tomate (Ruiz et al., 2005). Generalmente utilizando cultivares que confieren un mayor vigor a la variedad cultivada se mejora la produc- ción, modificando los ciclos y alargándolos. Es recomen- dable su uso para el desarrollo de variedades locales sobre las cuales resulta complicado introducir resistencia a en- fermedades. Su finalidad es la de cultivar una planta con el sistema radicular de otra, que es la que aporta las resis- tencias. La utilización del injerto en sandía previene la con- taminación de enfermedades cuyo inóculo permanece en el suelo y a partir de ahí, a través de las raíces, invade la planta, por esa razón la utilización de portainjertos resulta conveniente para prevenir enfermedades producidas por hongos y nematodos (García Jiménez et al., 2007). La uti- lización del injerto en sandía (Citrullus lanatus) se viene uti- lizando para soslayar problemas debidos al hongo vascular Fusarium oxysporum, aunque en los últimos años se están produciendo otros problemas sanitarios como ataque de nematodos, virus del cribado del melón (Melon necrotic spot virus) y otros problemas que pueden reducirse con la correcta elección del portainjerto. Uno de los principales inconvenientes de la utilización del injerto, es el sobrecoste de la planta, debido a la adquisi- ción del material vegetal, a la mano de obra requerida para efectuar el injerto, las instalaciones y condiciones climáti- cas que aseguren el éxito de su prendimiento. Actualmen- te se están buscando alternativas de mecanización del injerto para hacerlo más competitivo (Miguel et al., 2007). En el caso del cultivo de sandía ese sobrecoste queda tecnología