del melecotón, como por ejemplo el gen que de- termina el carácter de subácido frente a ácido, el que diferencia el paraguayo respecto a un melocotón tradicional, el de la nectarina respec- to al melocotón, o el gen que determina la época de maduración del fruto. Antes se seleccionaban los caracteres solamen- te cuando la planta los mostraba, a partir de un momento determinado se comenzaron a utilizar marcadores –trocitos de ADN que se encuen- tran en puntos concretos del genoma para los que hay técnicas sencillas de detección– situa- dos cerca del gen. Esto permite seleccionar, por ejemplo, un melocotón amarillo frente a uno blanco cuando la planta tiene un par de hojas, sin tener que esperar un par de años hasta que se pueda ver este caracter. También gracias a los marcadores se puede saber si una planta será resistente a nemátodos, desde el mismo momento que se puede extraer ADN. Lo que ha- bíamos hecho hasta ahora era buscar los mar- cadores que estuvieran lo más cerca posible de esos genes para poder seleccionar los caracte- res de una forma rápida y muy fiable. Ahora vamos a poder trabajar en lugar de con marcadores, con los genes directamente. La pri- mera ventaja que tendrá es la eficiencia. Con el marcador uno se equivoca de vez en cuando por- que existe una distancia entre gen y marcador y en ese recorrido pueden ocurrir una serie de recombinaciones que resultan en errores de pre- dicciónen que, en el caso que el marcador esté lejos, pueden ser bastante frecuentes. Si se va directamente al gen causal el grado de acierto es del 100%. Pero otra importante razón es por- que si sabemos cuáles y cómo son los genes es más fácil que encontremos nuevos variantes que en algunos casos pueden resultar intere- santes. Por ejemplo, conociendo el gen de la época de maduración del fruto se pueden bus- car variantes del mismo, y encontrar individuos que puedan madurar en diferentes épocas rela- tivamente cercanas entre ellas. Sin conocer el gen, esto sería muy difícil, porque basándonos sólo en el fenotipo estos estudios serían mucho menos fiables.. Otros de los caracteres, complejos, que tienen una extraordinaria importancia son los que in- fluyen en el calibre del fruto. Ahora podremos empezar a trabajar en serio en encontrar cuáles son los tres o cuatro genes que tienen más in- fluencia en este carácter para realizar una se- lección de calibres del fruto, ya sean grandes o pequeños, de una manera orientada y directa. ¿A qué se debe que el melocotón tenga pocos genes frente a las resistencia de plagas? El melocotón es una especie con poca variabili- dad genética, como ocurre en muchas otras es- pecies, la ha perdido durantes su domesticación y en su evolución posterior como cultivo, pero resulta que además el melocotón puede auto- fecundarse y ese tipo de especies normalmente pierden mucha más variabilidad que aquellas que son de polinización cruzada. Por otra parte, el melocotón tuvo que derivar de la China a Asia Central, de ahí a Europa, donde llegó hace unos 2.000 años, y después a América, y en este tra- horticultura