/GOURMET G GRANJA LA LLUEZA: ARTESANOS DEL PATO ranja La Llueza está ubicada en un bello paraje de Espinosa de Los Monteros, al norte de la provincia de Burgos. Allí, sus propietarios, el matrimonio Alejandro Fernández-Villa Gutiérrez-Solana y Elena López Reina, viven y crían a sus patos. “Somos una pequeña granja familiar con instalaciones homologadas para elaborar los produc- tos, que proceden única y exclusivamente de nuestros patos”. A ellos les gusta llamarse “artesanos” puesto que todo el proceso de elaboración es manual, y porque así lo acredita la inscripción de todos sus productos —‘Artesano Casero’— en el Registro Artesano Alimentario de Casti- El foie gras proviene del antiguo Egipto, y su consumo está documentado por toda Europa, pero es en Francia donde, por determinadas razones, se ha extendido más su producción y consumo. Hoy, miles de años después, prácticamente toda la producción está industrializada: se crían grandes cantidades de patos en poco tiempo, a los que se ceba en jaulas pequeñas con pasta y máquinas automáticas. Granja La Llueza propone otra forma de elaborar este exquisito manjar, tan valorado en la alta cocina: “La nuestra es una producción tradicional, con lotes pequeños, crianza muy larga, cebado a base de maíz cocido y muy poca mecanización. En definitiva, nada que ver”. lla y León (BU-0259). 12 / La suya es una historia singular. Fernández-Villa dejó atrás su carrera de ingeniero agrónomo y su vida en la ciudad para dedicarse a la cría de patos y a la comercialización de sus produc- tos. Sin duda, una apuesta valiente. “Fue surgiendo progresivamente desde 2004, ya que además de apreciar mucho todos los productos del pato, nos pareció muy inte- resante la posibilidad de elaborar en la granja los productos y comercializarlos directamente para no depender de inter- mediarios. Se inició en 2006 con la compra de la finca, y la producción Bloc de foie gras de Granja La Llueza. De vuelta a los orígenes