Protección Laboral 89 80 -La puesta a tierra se puede realizar a través de elementos estructurales cercanos que estén anclados en el suelo. -La puesta a tierra de elementos aislantes no sirve para disipar las cargas, ya que aquéllos no ofrecen un camino efectivo para ello. De hecho, solo se pueden utilizar si se justi ca que no pueden causar descargas en forma de abanico propagante. -Es esencial garantizar la continuidad en las conexiones equipotenciales de equipos de bombeo, tuberías y recipientes bajo el principio de redundancia. Es frecuente encontrar tuberías exibles normalizadas con el alma metálica en sus extremos sin conectar, olvidarse de la conexión conductora con pinzas normalizadas (véase la gura 33), conectar las pinzas en bocas de recipientes u otros lugares incorrectos o que no garantizan la puesta a tierra, emplear bombas de trasvase inadecuadas, etc. Control de la humedad ambiental El límite inferior reglamentario establecido para la humedad relativa en los centros de trabajo cuando existe riesgo por descargas electrostáticas es el 50%. No obstante, cuando se deba controlar la acumulación de electricidad estática de forma muy rigurosa, se recomienda intentar alcanzar el 60%, pues en estas condiciones el aire se comporta como conductor para disipar las cargas acumuladas. Esta medida puede ser muy útil, por ejemplo, en la industria del embalaje, imprenta, papel, plásticos, textil, electrónica, automovilística, farmacéutica, pirotécnica, etc., no sólo para evitar descargas peligrosas sino por razones productivas. Sin embargo, esta medida puede no ser aplicable en el caso de trabajar con polvos alimentarios, ya que el exceso de humedad facilita la proliferación de bacterias, hongos u otros agentes que pueden contaminar o apelmazar el producto hasta llegar incluso a su inutilización.Tampoco es e caz cuando se manipulan materiales hidrófobos, como, por ejemplo, el polietileno.. Suelos de material disipativo (no aislante) Según los requisitos legales, cuando se quiera evitar el riesgo de ignición también se deberán tener en cuenta las descargas electrostáticas producidas por los trabajadores o el entorno de trabajo como portadores o generadores de carga; para evitar que el trabajador adquiera carga simplemente caminando, una medida preventiva muy e caz consiste en la utilización de suelos con características disipativas. Para ello, existen diversas soluciones técnicas: -Someter los suelos a un tratamiento super cial para aumentar su conductividad; por ejemplo, agregando una capa de agua y glicerina al 50% con un paño antiestático -Utilizar suelos sintéticos especiales fabricados con una conductividad eléctrica determinada; los llamados “suelos técnicos”. Para más información, consúltese el apéndice “Fuentes de ignición. Electricidad estática” de la Guía Técnica 4o Trimestre 16 Lipoatro a semicircular Una de las dolencias que se relaciona con la electricidad estática es la denominada lipoatro a semicircular, que es un trastorno de la grasa subcutánea consistente en la destrucción del tejido adiposo y cuya manifestación clínica habitual es un hundimiento en las caras anterior y lateral de los muslos y, ocasionalmente, de los antebrazos. En el caso de las piernas, el trastorno aparece a una altura aproximada de 72 centímetros con respecto al suelo, que coincide con la del tablero de las mesas de trabajo. Actualmente la información técnica que existe sobre esta dolencia es escasa, lo que la convierte en idiopática (sin causa conocida); además, se piensa que es un trastorno de origen multifactorial, por lo que en el caso de que la electricidad estática entre en juego, es posible que no sea la única causa. Este tipo de atro a se trata más de un defecto estético que de una enfermedad propiamente dicha, puesto que es una lesión benigna, no causa dolor físico y es reversible. La hipótesis más apoyada para explicar la generación de esta atro a en personas que trabajan en o cinas es la acumulación de electricidad estática en estos lugares en los que, al producirse micro-traumatismos por descargas internas, activan los macrófagos, destruyendo células grasas en determinadas zonas.Aunque hay que tener en cuenta que las lesiones suelen desaparecer tras eliminar la exposición. Este hecho podría explicar, además, la gran descompensación que existe en la proporción de los efectos entre hombres y mujeres (entre el 10% y el 15% de los casos totales detectados), que podría estar relacionada con una diferente disposición del tejido graso en la zona de los muslos. Los suelos técnicos tienen conductividad eléctrica para evitar la acumulación de cargas Técnicas de prevención