3o Trimestre 16 ·Turnicidad En la revista “Por Experiencia”, de ISTAS (Instituto Sindical de Ambiente Trabajo y Salud), podemos leer que “bajos niveles de serotonina explican la fatiga y alteraciones del sueño de los trabajadores a turnos”. Comparando los niveles de serotonina de trabajadores de jornada diurna y trabajadores con turnos rotativos, se ha demostrado (revista Sleep) que los trabajadores a turnos tienen bajos niveles de serotonina, una sustancia presente en nuestro sistema nervioso y que regula los patrones de sueño y vigilia. Vemos pues que interferir en la biología del sueño supone modi car la bioquímica del organismo, creando dé cits que pueden conducir a la aparición de enfermedades. Riesgo emergente con consecuencias La intensi cación de la producción ha traído consigo la introducción masiva del trabajo a turnos y el trabajo nocturno. Expertos de la OIT a rman que “cada quince años de trabajo nocturno se produce un envejecimiento adicional de unos cinco”. Pero es la fatiga, manifestada en una disminución del poder funcional de los órganos, y sensación de malestar, la punta del iceberg de un problema de salud laboral más serio, que establece la relación vinculante entre la organización del trabajo y la salud.Veamos el corolario del trabajo nocturno en los diferentes ámbitos del trabajador: ·Repercusiones sobre la vida familiar y social El trabajo en turnos rotatorios produce una marcada perturbación en la vida familiar y social de los trabajadores. Especialmente durante la realización del turno de noche, el ritmo de vida del trabajador va a destiempo con el de su familia y del resto de la sociedad. Cuando él trabaja, los demás descansan y cuando él tiene la oportunidad Cada quince años de trabajo nocturno se produce un envejecimiento prematuro de unos cinco años Protección Laboral 88 Cohabitar saludablemente con ritmos de trabajo antinaturales Para preservar la calidad de vida del trabajador es importante que éste pueda intervenir en la organización del trabajo y sobre todo en el tiempo de trabajo, factor que determina el resto de tiempos de nuestra existencia (tiempo social, descanso, etc). Convivir con la turnicidad, cuando no pueden aplicarse otras soluciones organizativas, puede compensarse con medidas especí cas para los trabajadores sujetos a turnos, como: -Lograr la máxima compatibilidad cronobiológica. -Valorar las peculiaridades individuales (hipersensibilidad, crono-toxicología). -Aumento de las pausas y tiempos de recuperación de fatiga. -Compensación en días libres. -Reducción de la jornada semanal a 32 horas. -Prohibición de las horas extras. -Limitar el tiempo de trabajo a turnos y nocturno a 15 años. -Adelantar la edad de jubilación. -Evitar el trabajo nocturno en solitario. -Disciplina alimentaria (comida caliente) con pausas adecuadas. -Reducir o eliminar el trabajo a rendimiento durante la noche. -Recibir una vigilancia médica especí ca. -Pausas recuperadoras de fatiga (siesta) en franjas horarias adecuadas. -Medios de transporte a cargo de la empresa. -Equiparación en las posibilidades de formación y promoción con el resto de trabajadores. La visión sindical al respecto indica que “para mejorar la situación de los trabajadores en régimen de turnos se debe abandonar el sistema tradicional de primas, sustituyéndolo por un aumento de las pausas y del tiempo de descanso, una reducción de la edad necesaria para la jubilación y una mejora de las condiciones generales en que se realiza el trabajo. Conviene tener presente que la fatiga crónica, que lleva al envejecimiento precoz, no se recupera con primas, sino con descanso”. 97 Trabajo y salud