VORTEX La felicidad como responsabilidad empresarial CALIDAD DE VIDA LABORAL “Director/a de felicidad” es el nuevo cargo que algunas empresas ya han incorporado a sus plantillas. Patrícia Puig es la Responsable de Felicidad de Vortex, una pequeña empresa catalana dedicada a la modelización de viento en cualquier lugar del mundo y cuyos productos venden a través de su plataforma on-line. Patrícia y sus ocho compañeros tienen 10 días más de vacaciones al año para poder conciliar mejor su vida personal y laboral, entre otras muchas ventajas orientadas a man- tener e incrementar el bienestar de los trabajadores de la empresa. Eres técnica meteoróloga, pero también “responsable de felici- dad”. ¿Cómo surgió este concepto? ¿Y, por qué tú? Esta figura surgió de forma espontánea a partir de una charla informal con Pep, el CEO y socio fundador de Vortex. Muchas veces hablamos sobre temas relacionados con la psicología, porque nos parecen muy interesantes. De hecho yo lo estoy estudiando como segunda carrera en mi tiempo libre. Para él es muy importante que los trabajadores nos sintamos cómodos y siempre ha defendido que la principal misión de Vortex es la felicidad de éstos. Con una persona dentro del equipo que pueda recopilar las preocupa- ciones y propuestas de los compañeros para mejorar la calidad de la relación laboral-personal se pensó que sería más fácil cumplir con dicha misión, pero no surgió para subsanar un problema, sino simplemente, para darle un valor añadido a la empresa. Para ser mejores personas y mejores trabajadores. ¿Desde cuando eres Responsable de la Felicidad de tus com- pañeros? El “cargo” de Responsable de la Felicidad lo tengo desde principios de 2013, aunque no es mi tarea principal. Yo soy física y meteoróloga y aquí trabajo dentro del departamento técnico, donde me siento muy cómoda. La figura de Responsable de la Felicidad no tiene unas tareas asignadas ni sistematizadas; simplemente se trata de una medida más para que los empleados de Vortex sean conscientes de que se les va a escuchar con cualquier propuesta de mejora de su bienestar dentro de la compañía. ¿Y en qué consiste? El objetivo es claro, y es que los trabajadores nos sintamos felices y respetados como personas. Pero no hay unas tareas diarias, sino sim- plemente una persona que, si capta alguna preocupación o insatisfac- ción por parte de alguno de sus compañeros o ella misma, lo pueda transmitir al director de la empresa para, entre todos, encontrar una solución. Los trabajadores tienen la salvedad de que aquí venimos muy contentos y relajados a la oficina, porque sabemos que si tenemos cualquier imprevisto personal podremos afrontarlo sin miedo a lo que nos puedan decir los jefes. Básicamente, pues, un responsable de felicidad debe gestionar y fomentar el desarrollo profesional continuado, la motivación, el trabajo en equipo, promover los hábitos saludables de los empleados dentro y fuera de la empresa para la reducción de las contingencias comunes y lograr mejoras indirectas. 34