Trabajo y salud PROTECCIÓN LABORAL 83 | 2oTrimestre15 94 inadecuado de herramientas y manipulación incorrecta de explosivos (...) La plataforma de perforación, la plataforma giratoria, y el equipo suelen estar resbaladizos y vibran debido al funcionamiento del motor y a la perforación, por lo que los trabajadores han de realizar movimientos precisos y cuidadosos (...). Existe la posibilidad de exposición aguda y crónica a una gran variedad de materiales y sustancias químicas insalubres: -Petróleo crudo, gas natural y ácido sulfhídrico durante la perforación y los reventones. -Metales pesados, benceno y otros contaminantes presentes en el crudo. -Amianto, formaldehido, ácido clorhídrico y otras sustancias químicas y materiales peligrosos como las sustancias radiactivas naturales. En un trabajo necesariamente de equipo, el estado de ánimo de los trabajadores marca la diferencia entre seguridad o azar. Son muchas las actuaciones para mantener el bienestar laboral de las dotaciones, siendo las más básicas –según la OIT- los “períodos adecuados de descanso y relajación, alimentación nutritiva e higiene y alojamientos apropiados, con aire acondicionado en climas húmedos y calurosos, y calefacción en zonas de clima frío”. Incendio y explosión Al perforar un pozo petrolífero siempre existe el riesgo de reventón y que se genere una nube de gas y vapor seguida de explosión e incendio. A ello cabe añadir un potencial adicional de riesgo de incendio y explosión en las operaciones de procesado del gas. En semejante contexto, y con un riesgo que es típico de la actividad, los sistemas antiincendios afrontan un cometido muy exigente. Deben resistir en un ambiente hostil y muy corrosivo, sin exigir excesivo mantenimiento, y responder sin demora a fuegos de evolución rápida. El fuego en una plataforma petrolífera puede producirse de formas diferentes: los fuegos alimentados por el flujo de crudo se caracterizan por un rápido incremento de la temperatura (con valores de hasta 1.300o C); los fuegos de pulverización continua, o tipo spray, poseen unos elevados flujos caloríficos que pueden provocar rápidamente un fallo estructural de la plataforma (y su deriva o hundimiento). Los fuegos de llamarada (flash) o bola producen radiación térmica de rápida propagación que puede añadir focos de fuego secundarios. Afrontar esta problemática exige los mejores agentes extintores, pero el entrenamiento de las tripulaciones también es un asunto esencial. Los sistemas de agua nebulizada consiguen una inmediata reducción de la temperatura del fuego, protegiendo las zonas adyacentes al foco del calor radiante, al tiempo que amalgaman las partículas suspendidas en el humo y retienen los gases solubles en agua. Además, el agente extintor (agua marina) es ilimitado, en este caso. También se emplea la extinción con espuma, conocida por la sigla inglesa AFFF (Aqueous Film Forming Foam) que, como indica su nombre, forma una película acuosa. La eficacia del sistema depende del equipo de impulsión y la distribución del sistema. Prevención en un medio inseguro ·Equipo de perforación Su funcionamiento seguro depende de la marcha suave y el correcto mantenimiento del cabrestante, con los tornos auxiliares y los sistemas de freno bien ajustados. El empleo de explosivos se restringirá exclusivamente al personal debidamente cualificado. En cuanto a la pistola de perforación, y entre otras medidas, es preceptivo despejar la línea de fuego y evacuar al personal innecesario de la plataforma y de la planta baja de la torre de perforación cuando se baje la pistola al pozo o se extraiga de éste. ·Prevención y protección contra incendios Los trabajadores deben estar entrenados en la Accidente, evento cotidiano en una offshore Aunque no se producen a diario, los accidentes de trabajo offshore deben contemplarse como una con- tingencia no sólo posible, sino cotidiana. Los ejemplos avalan esta tesis. En julio de 1988, la plataforma británica Piper Alpha (Mar del Norte) estalló después de una fuga de gas, y se hundió en 22 minutos, cobrándose la vida de 167 trabajadores de los 232 que componían la dota- ción. La explosión origen del siniestro sólo ocasionó 2 víctimas directas, el resto lo fueron por la inhala- ción de monóxido de carbono en la zona de alojamiento, mientras esperaban su evacuación mediante helicóptero. La brecha en el sistema de seguridad pronto quedó al descubierto: la zona de alojamiento del personal no era a prueba de humo, y no se disponía de sistema de evacuación alternativo al aéreo. De los supervivientes, 23 habían salvado la vida por haberse arrojado al mar. Paradójicamente, otras plataformas vecinas, que enviaban petróleo a tierra a través de la Piper, no le pres- taron ayuda por pensar que el personal a bordo podría controlar el incendio. Hace aproximadamente un lustro se registró en el Golfo de México el incendio y posterior explosión de la plataforma Deepwater Horizon, en el que murieron 11 personas. Al drama humano hay que añadir la contaminación marina. La fuga de crudo se produjo en el pozo (1.200 metros de profundidad) y el sellado del mismo comportó varios intentos fallidos, meses de trabajo y el vertido al medio marino de unos 800.000 litros diarios de petróleo, que por su naturaleza hidrófoba, acaba siempre creando una capa sobre la superficie del agua.