INFORMACIÓN EMPRESARIAL La TECNOLOGÍA de Boa:del laboratorio A LAS PRUEBAS DE campo EPI: MATERIALES, MAQUINARIA Y TÉCNICAS PARA SU FABRICACIÓN REDWING TEST BOOTS WITH BOA 86 En tan sólo diez años creando prototipos, pruebas y fabricación de sistemas de cierre, la tecnología de Boa ha revolucionado el ajuste, la seguridad y la funcionalidad con una amplia gama de útiles productos. Usando la creatividad y la innovación como motores del desarrollo de sus productos, los diseñadores de Boa, ingenieros y probadores de campo (“field testers”) han aportado nuevas ideas a los sistemas de cierre para toda clase de productos, desde botas para la construcción hasta cascos de esquí y snowboard. Boa nació de una idea original del surfista y empresario del sur de California, Gary Hammerslag. A mediados de la década de los noventa, cuando Hammerslag se trasladó con su familia a Steamboats Springs, Colorado, se dió cuenta en primera persona de las deficiencias de los cordones tradicionales en las botas de snowboard y en los patines de hockey. “No se quedan atados, no te dan la posibilidad de ajustar la tensión y crean puntos de presión”, se lamentó. Así que se puso a trabajar en lo que pronto sería el primer prototipo de Boa. No pasó mucho tiempo después de las primeras pruebas y ajustes para que Hammerslag obtuviera la patente para el sistema de cierre Boa, que combina un botón de tensión graduable con un mecanismo rápido para aflojar y desabrochar los cordones. De la teoría a la práctica En 2001, algunas marcas de reconocido prestigio en el sector del snowboard como K2 y Vans comprobaron el potencial del sistema de cierre de Boa y lanzaron su primera línea de botas con este sistema. Esta asociación tuvo un éxito inmediato y las ventas de productos de Boa crecieron rápidamente. La respuesta positiva de los consumidores ayudó a difundir un mensaje a toda la industria de que Boa, además de ofrecer un producto de alta calidad, era una marca acreditada. Poco tiempo después, numerosos productos comenzaron a integrar el sistema de cierre de Boa. Actualmente, Boa tiene más de 90 “partners”, con diferentes aplicaciones como: actividades al aire libre, golf, “running”, ciclismo, actividades relacionadas con la nieve e industrias médicas, entre otras. Un proceso de verificación extremadamente riguroso se encuentra en la base del desarrollo de los productos de Boa. En la sede central de Boa a nivel mundial, que se encuentra en Denver (Colorado), un equipo de ingenieros somete los productos de Boa a tests diarios. “Cada una de las partes del sistema se someten a una serie de pruebas de resistencia”, afirma Adam Auell, ingeniero en el laboratorio de Boa. “Las bobinas son comprobadas para máxima potencia de entrada según el esfuerzo de torsión???, en los cordones se comprueba la fuerza de tensión, la resistencia a la fatiga y a la abrasión. La conclusión es que si no funciona en el laboratorio, no funcionará en la práctica”. Para garantizar todavía más que todos los productos que incorporan las soluciones de Boa cumplan con un estándar de calidad alto, éstos son puestos a prueba directamente por usuarios. “Tenemos un grupo equilibrado de adictos a la adrenalina, atletas en buena forma y trabajadores de la industria pesada que prueban los productos todos los días. Exigimos resultados de nuestros productos”, reconoce Hammerslag. Y los resultados han sido espectaculares. Un grupo diverso de usuarios - entre los que se encuentran constructores de viviendas, soldadores, granjeros, albañiles y paisajistas- comprobaron la duración de las botas con el sistema de cierre de Boa, obteniendo un resultado medio de 1.761 horas de trabajo. El sistema de cierre de Boa tuvo como resultado una mayor duración de las botas en todos los casos. Uno de los trabajadores participantes en el test alcanzó las 2.900 horas, y el sistema de Boa se mantuvo intacto. Más allá de las rigurosas pruebas a los que somete sus productos esta marca, el mejor testimonio de la calidad de la tecnología de Boa es la respuesta de los usuarios. Menos del uno por cierto de todos los sistemas de cierre de Boa son devueltos debido a un fallo. “Con más de seis millones de productos en el mercado, que es un número impresionante, los productos de Boa han demostrado utilidad y durabilidad. Estamos muy contentos en la recepción general y estoy verdaderamente emocionado por todo lo que nos queda por venir”, concluye Hammerslag.