Trabajo y salud PROTECCIÓN LABORAL 67 | 2oTrimestre11 vómitos son síntomas de intoxicación debi- da a la sobreexposición. Entre la diversidad de sustancias, pueden citarse el amoníaco, tricloroetileno, gas CO, PVC, sustancias cáusticas de limpieza, fumigantes, etc. Trabajar en cadena Los mataderos son consustanciales a la industria alimentaria. Estas instalaciones tra- tan de maximizar el volumen de animales que despachan aumentando la velocidad de proceso de la cadena. La velocidad es direc- tamente proporcional a los beneficios, y los trabajadores pagan el tributo de las cadenas. Los operarios desarrollan su labor en medio de maquinaria automática que mueve los animales a velocidades que son difíciles de imaginar. En los mataderos avícolas, son miles de pollos por hora, a los que los traba- jadores deben asestar cortes precisos valién- dose de herramientas punzantes, cuchillos y otros útiles de trabajo. Los empleados invariablemente citan la velocidad de las cadenas como el principal foco de peligro. El despiece de aves es fre- nético. Los trabajadores de la cadena efec- túan más de 20.000 cortes repetitivos en una jornada laboral. Riesgos “poliédricos” Diversos riesgos tienen varias caras: por ejemplo, los cortes y las afecciones dérmicas no sólo afectan a la salud de las manos, tam- bién constituyen un foco potencial de con- taminación de los alimentos manipulados. ·El problema de los cortes En un tiempo, la mayoría de los cortes sana- rá, pero las repercusiones se harán notar a corto y medio plazo. El trabajador tendrá que estar unos días de baja para que cure su mano (repercusión económica). La lesión también supondrá unos gastos económicos y en tiempo de gestión, primas de seguro y posibles litigios. Aunque las pequeñas lesiones parecen no preocupar al trabajador ni a la compañía, aceptar semejante situación supone una falsa economía para la empresa dadas las pérdidas generadas por un pequeño corte, pérdidas que son desproporcionadas res- pecto a la gravedad de la lesión. Curar un pequeño corte “in situ” puede suponer sólo el lavado del mismo y la aplica- ción de un emplasto. Sin embargo, esta ope- ración requiere que tanto el herido como el trabajador designado para los primeros auxi- lios dejen de trabajar, abandonen la línea de producción y se concentren en la primera cura. Asimismo, existe un riesgo potencial de contaminación del producto con la san- gre del trabajador. Los trabajadores que sufren cortes menores y heridas en las manos pueden afrontar una serie de problemas como infección, daño de estructuras subcutáneas, irritación severa y cicatrices. Los cortes severos y los defectos leves del tejido pueden requerir la implanta- ción de injertos, dejando cicatrices e, inclu- so, rigidez y falta de movilidad en la mano, lo que merma irreversiblemente la velocidad y precisión del trabajador. Las infecciones pueden extenderse, mostrando inicialmente sólo leves indicios de un problema más grave. Los síntomas de alarma son fiebre, escalofríos o progresivo empeoramiento de la rojez, dolor o inflamación de la mano. Si el corte produjo daños en los nervios, puede que no haya recuperación, por lo que la pérdida de sensibilidad táctil, fuerza de la 130 Identificar los peligros Si las manos son necesarias para el trabajo, en la industria alimentaria se convierten en útiles imprescindibles. Diariamente, las manos –y otras partes del cuerpo- se ven expuestas a riesgos de diferente naturaleza. ·Riesgo químico Las manos expuestas a productos químicos pueden sufrir irritaciones, quemaduras o úlceras. Los productos químicos pueden romper la defensa que nos proporciona la piel y penetrar en la sangre, con resultados peligrosos y, a veces, fatales. ·Riesgo mecánico Implica cortes, aplastamiento o abrasión general, provocados por diferentes útiles de trabajo. Las herramientas afiladas presentan un peligro evidente, así como las partes punzantes de las materias primas procesadas (especialmente en el caso del pescado). El cuchillo, herramienta omnipresente en la industria alimentaria, supone la mayor ame- naza para la integridad de las manos de los trabajadores. Las lesiones pueden incluir desde el pequeño corte a daños severos de nervios, tendones, huesos, sin descartar la amputación. ·Riesgo térmico Va asociado a procesos industriales: el calor generado por el agua hirviendo de las coci- nas, los hornos, ollas, peroles y perolines donde se procesan alimentos. Pero, el frío extremo es igualmente peligroso, especialmente para las manos que tienen que tocar continuamente alimentos congelados, poner y sacar productos de congeladores y cáma- ras frigoríficas, o trabajar con nitrógeno líquido. ·Riesgos eléctricos Las instalaciones eléctricas defectuosas o los cables mal aislados pueden ser causa de accidentes. Siempre existe el riesgo de entrar en contacto y lesionarse con la electrici- dad utilizada para la iluminación, la calefacción y la alimentación de equipamientos en el trabajo. El contacto puede producirse al ejecutar tareas de mantenimiento de la maquinaria. ·Riesgos producidos por vibración Las vibraciones pueden originar problemas en las articulaciones y el síndrome de los dedos blancos (falta de riego sanguíneo). Son fuente de vibraciones la maquinaria y los equipos utilizados en el procesado o preparación de los alimentos, por ejemplo, el uso de batidoras, cuchillos y sierras eléctricas, o las sierras empleadas en el descuartizado de reses u otros animales en canal. Y en la lista, que no es exhaustiva, no pueden faltar los riesgos biológicos (materias pri- mas), o ergonómicos (movimientos repetitivos).