Congresos, jornadas y eventos PROTECCIÓN LABORAL 63 | 2oTrimestre10 monarca Carlos III describiendo la catástro- fe morbosa de las minas mercuriales de Almadén y su secuela de personas trémulas (temblores por intoxicación con mercurio). Castejón señaló que “no se hizo nada, entre otras cosas, por codicia. Entonces el mercu- rio tenía un valor geo-económico pues se empleaba como amalgama alquimista en la aleación para obtener plata”. El mal no fue exclusivo de España, como lo prueba el dicho “As mad as a hatter” (tan loco como un sombrerero). Los desvaríos mentales de los sombrereros no eran un patrimonio endógeno del gremio de génesis desconoci- da. Bien al contrario, la razón de que muchos sombrereros perdieran sus faculta- des mentales se debía a la intoxicación por mercurio, metal que se empleaba en la manufactura de los sombreros. -Colorante de bencidina para el textil. Es un potente carcinógeno. Hasta 1950 se acumu- lan evidencias de su toxicidad, pero no se hace nada serio hasta enero de 1980 (NIOSH); en Europa su prohibición no llega- ría hasta 1988. -Amianto. Entre 1935 y 1953 ya aparecen artículos científicos que hablan del cáncer relacionándolo con el amianto, que –des- pués- se ha rebautizado como el “polvo ase- sino”, ensombreciendo los calificativos de “mineral mágico”. Sin embargo, hasta la década de los ochenta no se empezarían a tomar las primeras medidas. Hoy, como sabemos, está prohibido su uso, represen- tando un grave problema de salud laboral toda operación de desamiantado, y un ries- go insidioso para el sector de la construc- ción (rehabilitación de edificios). -Telefonía móvil. Tenemos informes que la denigran (nocividad de las micro-ondas) y contra-informes que la exoneran. En cual- quier caso, parece imponerse una incerti- dumbre sobre la presunta nocividad de los campos magnéticos: estudios sobre gliomas y meningiomas (2009). Finalmente, parece que no habría nexo causa-efecto en el desa- rrollo de los citados tumores. Tras explicar los ejemplos anteriores, (que hemos resumido por limitaciones de espa- cio) Castejón recuperó el argumento de la ignorancia y la codicia, que suelen ser los impulsores de actitudes y comportamientos discutibles desde diversos puntos de vista (la prevención entre éstos). Al respecto, señaló que “la nano-tecnología es un viejo riesgo porque se está introduciendo sin tener en cuenta su capacidad nociva. Es un viejo riesgo porque ciertas esferas no quie- ren reconocer el peligro, desoyendo la voz de la previsión social que reclama mayor prudencia. Pero también es un nuevo ries- go, como se desprende del trabajo intenso que se está haciendo para conocerlo y redu- cirlo (The National Nanotechnology Initiati- ve. EEUU). Ello me lleva a concluir que es un riesgo viejo y nuevo, las dos cosas. Ha veni- do, asociado al negocio, y dispuesto a que- darse, sin duda. Las cosas son así”. Políticas de prevención de riesgos laborales en nanotecnología Asun Galera (Profesora del Departamento de Organización de Empresas. Universitat Politècnica de Catalunya) abordó los enfo- ques preventivos que aplican Estados Uni- dos y Europa en materia de nanotecnología. Señaló dos ideas básicas. En primer lugar, la nanotecnología es una revolución tecnológi- ca, transversal, de gran impacto en todas las áreas, sin que esté clara (porque nos supera actualmente) su repercusión sobre la salud. En segundo lugar, la seguridad y la salud laborales están en la ‘parrilla de salida’ de las políticas que se están desarrollando en rela- ción con las nanotecnologías. En este punto subrayó que “la seguridad y la salud de las personas será el factor limitante”. La conclusión con la que la ponente clausu- ró la Jornada fue que estamos ante “un ries- go emergente que provoca muchas incerti- dumbres, dado que hay múltiples estudios, limitados en sus conclusiones y, frecuente- mente, contradictorios. La tecnología La ínfima granulometría de los nano-materiales genera problemas de salud semejantes a los del amianto –incluida la nano- no es buena ni mala per se. Así, tenemos que estar alerta porque sur- gen nuevos materiales, materiales que son desconocidos. Sabemos que no sabemos... y que hay un recorrido -extenso recorrido- para que trabajen los prevencionistas”. *Manuel Domene Periodista 164 ¿Hay algo imposible? Podemos creer al científico que afirma que algo es posible. Sin embargo, seguramente recelaremos del que nos diga que algo es imposible. Hoy son muchos los jóvenes que suscriben el slogan de “impossible is not- hing”. Ésta también podría ser la máxima de la red Nanospain que, en uno de sus infor- mes, calificaba de “impresionantes” las pers- pectivas que abre la nanotecnología, asegu- rando que “a lo largo de las dos próximas décadas, será posible obtener potenciales avances que ahora parecen de ciencia-fic- ción”. Y, entre éstos, citaba: -El aumento en varios órdenes de magnitud de las capacidades actuales de almacena- miento de datos. Pocos centímetros cuadra- dos contendrían la misma información que cientos de miles de libros. -Desarrollar materiales diez veces más resis- tentes que el acero pero que serán mucho más ligeros. Esto optimizaría los medios de transporte (más seguros, con menor consu- mo y menos contaminación). -Desarrollar computadoras y sistemas de transferencia de datos más rápidos y de una mayor integración, que superarán en miles de veces las prestaciones de los sistemas actuales. -Diseñar y desarrollar sistemas destinados a la vehiculización de moléculas activas hacia el órgano diana, tras su administración al organismo humano o animal (nano-farmaco- pea). Mejorará la eficacia terapéutica redu- ciendo la toxicidad de los fármacos (terapia génica, lucha contra el cáncer). -Crear minúsculos sensores de muy bajo pre- cio, o sistemas de extracción de contami- nantes tanto del agua como del aire, mejo- rando el medio ambiente. Impossible is nothing, sólo hay que dar rien- da suelta a la imaginación.