Confort Térmico o Ergonomía PROTECCIÓN LABORAL 62 | 1oTrimestre10 Afecciones y enfermedades cardiovasculares La exposición al frío aumenta la morbi-mor- talidad cardiovascular, que, como ocurre con otras patologías, son más frecuentes o registran agravamientos durante la estación más fría. Los estudios epidemiológicos sugieren que los síntomas cardiovasculares (arritmias y dolores de pecho) se presentarí- an durante el frío para un 4% de la población al menos. Examinemos la función cardíaca bajo el efecto del frío. ·El aparato cardiovascular durante el ejerci- cio con frío La carga cardíaca al trabajar en un ambiente frío es mayor debido a la vasoconstricción inducida, que reduce la circulación periféri- ca, concentrando el flujo sanguíneo en el interior del organismo. Paralelamente, aumenta la presión cardíaca y, por tanto, el bombeo del corazón, que ha de latir más de prisa (aumentar su frecuencia). Como puede suponerse por la reacción fisiológica inducida, la exposición al frío es extenuante para el corazón, máxime cuando la sobre- exigencia se ve acompañada por el ejercicio físico que se está desarrollando en el entor- no frío. Obviamente, estas condiciones son aún más exigentes y graves para las personas que sufren enfermedades cardiovasculares (insu- ficiencia coronaria, angina de pecho). La res- puesta siempre será diferente a la de perso- nas sanas, con menor capacidad para el trabajo. Pruebas de esfuerzo realizadas por pacientes con patología isquémica (falta de riego) evidencian que el ejercicio en un entorno frío induce en los mismos una dis- minución del flujo sanguíneo coronario, pudiendo llegar a experimentar espasmos coronarios acompañados de dolor pectoral e, incluso, infarto de miocardio. Por desgracia, la literatura médica no ha pro- ducido estudios que examinen las enferme- dades cardiovasculares en el entorno del tra- bajo con frío. En cualquier caso, nos consta que los estudios epidemiológicos relativos a los factores de riesgo cardiovascular y el entorno de trabajo señalan el posible efecto agudo del calor y el frío en las citadas dolen- cias. Sin duda el trabajo con frío produce alteraciones hemodinámicas que, en absolu- El frío, y la nieve como manifestación, lejos de ser un juego de niños, tienen una cara menos amable, constituyendo un riesgo añadido al trabajo. Foto: Manuel Domene © to, son aconsejables para personas con ries- go cardíaco. ·Hipertensión y trabajo con frío Estudios experimentales señalan que la exposición al frío aumenta la presión sistóli- ca y diastólica en individuos sanos. El aumento de la presión sanguínea en medio frío depende de factores como la intensidad y el tipo de enfriamiento (todo el cuerpo o una zona localizada, presencia de agua, aire...), así como de factores individuales. El tipo de enfriamiento es determinante para la respuesta cardiovascular: una repentina exposición local a frío severo, como podría ser la inmersión en agua fría, tiene unos efectos más agudos que una exposición moderada y duradera de todo el cuerpo al frío. En cualquier caso, conviene tener pre- sente que, independientemente del tipo de exposición, si ésta eleva la presión arterial, aumentará el riesgo de episodios cardiovas- culares. En cuanto a la población de riesgo, hay que decir que las bajas temperaturas exacerban la hipertensión en individuos hipertensos, fenómeno que se ve agravado en función del envejecimiento. ·Circulación periférica y trabajo en medio frío El Síndrome de Raynaud (SR) es un proble- ma clínico común que se manifiesta con vaso-espasmos recurrentes localizados en los dedos de manos y pies. Suele ir asociado a la exposición al frío o crisis emocionales. En personas con dicho síndrome, la normal vasoconstricción por efecto del frío (y el consiguiente entumecimiento de las manos) supone una merma importantísima de la habilidad y destreza manual. Los trabajado- res con SR muestran una vasodilatación (inducida por el frío) alterada, así como una lenta recuperación de la circulación periféri- ca después de la exposición. En los estudios experimentales llevados a cabo, tanto las personas sanas como las que padecen el sín- drome de Raynaud disminuían su percep- ción sensorial tras la exposición al frío. La prestación manual era inferior en los sujetos con SR que en los sujetos sanos; los que tie- nen el síndrome tienen menor flujo sanguí- neo, su respuesta de calentamiento de los dedos es prolongada, siendo su temperatura basal más baja. Todo ello es indicativo de