138 Protección Respiratoria Asegurar la calidad del aire respirable Manuel Domene El riesgo respiratorio es inherente a multi- tud de sectores de actividad y puestos de trabajo. Con frecuencia, se conoce el riesgo, pero no se hace lo adecuado –o, sencilla- mente, no se hace nada- para mitigarlo. Los contaminantes susceptibles de provocar lesiones o enfermedades profesionales se presen- tan bajo formas diversas: partículas y gases. Los equipos de protección respiratoria pueden divi- dirse, en una primera clasificación, en material filtrante y material de suministro de aire libre de contaminantes. Tanto unos como otros tienen el mismo cometido: proporcionar al usuario aire respirable. Como tantas otras áreas de la seguridad y la salud laboral, la protección y seguridad respiratoria no es materia que ofrezca segundas oportunidades: una protección deficiente puede conducir a acci- dentes fatales y, a largo plazo, a enfermedades irreversibles. Los contaminantes y los equipos de protección Los agentes a los que pueden enfrentarse los tra- bajadores en su actividad se clasifican en dos grandes grupos. -Agentes físicos (partículas): polvo, nieblas o humos. -Agentes químicos: gases como, por ejemplo, los derivados de procesos de soldadura (óxido de nitrógeno, monóxido de carbono etc.) y vapores, como los producidos en la evaporación de un líquido o un sólido (aluminio, cromo etc.) La clasificación de los respiradores es amplia, por lo que la selección adecuada para cada riesgo específico requiere unos conocimientos avanza- dos o, en su defecto, recurrir al consejo experto de los fabricantes. A la hora de elegir un equipo de protección respiratoria es preciso considerar cuestiones como: -¿Hay suficiente oxígeno en el ambiente? (míni- mo 17% Vol. O2) -¿Qué contaminantes hay en el aire ambiente? -¿Cuáles son las concentraciones del contami- nante? -¿Los contaminantes son: gases, vapores, partícu- las o una combinación de ellos? -¿Es compatible el equipo con otros EPI? Y muchas otras... Nuestro panel de expertos nos ilustra. En esta ocasión, contamos con la opinión de: KCP*, Medop, Moldex, MSA, North, Omni, Sibol, Scott y Sperian. Riesgos respiratorios habituales / grado de conocimiento · KCP* Kimberly Clark Professional* nos recuerda que “son muchas las actividades que pueden provo- car riesgos respiratorios. La longitud y la fre- cuencia del tiempo de exposición y el nivel de concentración del agente contaminante aumen- tan las posibilidades de desarrollar problemas de salud. Los riesgos más habituales son el polvo, los vapores, la bruma, el humo y la niebla, agentes que se manifiestan de muchas maneras”. · Medop Cita Medop que “los agentes a los que pueden enfrentarse los trabajadores en su actividad se clasifican en: - Agentes físicos (partículas): polvo, nieblas o humos. - Agentes químicos: gases como por ejemplo, los derivados de procesos de soldadura (óxido de nitrógeno, monóxido de carbono etc.) y vapores, como los producidos en la evaporación de un líquido o un sólido (aluminio, cromo etc.)” Esta firma señala que “el aire ambiente en el entorno de las actividades laborales puede conte- ner contaminantes en forma de sustancias sóli- das, líquidas o gaseosas, que afecten a la salud del trabajador y se denominan peligros respiratorios, definidos comúnmente como: - Polvo, dispersión de finas partículas sólidas, generadas por el propio proceso productivo o como arrastre del originado externamente al puesto de trabajo; - Niebla, pequeñas gotas de líquido suspendidas en el aire; - Aerosol, dispersión de partículas sólidas y líqui- das en el aire; - Humos, además de gases y vapores contienen materias sólidas en suspensión (hollín, óxidos metálicos, aerosoles aceite, etc.). - Gases y vapores, que pueden ser inertes (CO2 desplaza el O2), asfixiantes (CO), irritantes (Cl2) y narcóticos (disolventes)”. · Moldex Respecto de la consciencia del riesgo, Moldex entiende que “por supuesto que se conocen. Desde ya hace unos años todos los organismos implicados (administraciones, empresas, sindica- tos, técnicos de prevención, fabricantes y distri- buidores de EPI) nos hemos involucrado mucho en la información y formación de los trabajado- res. Pero, a diferencia quizás de otro tipo de ries- gos -cuyas consecuencias fatales son muy visibles (caídas por ejemplo)- los riesgos de no utilizar protección respiratoria no son tan a corto plazo, y eso provoca, en algunos casos, -que no en todos- una relajación en los usos de la misma”. · Omni Opina que “en muchos casos, los trabajadores conocen los riesgos, pero, por una falta de for- mación, ignoran la importancia que tiene usar la protección respiratoria. En el caso de que expe- rimenten irritación o problemas directamente, serán conscientes que necesitan protección. Sin embargo, los trabajadores subestiman los riegos en muchos casos porque no padecen ningún problema en ese momento, problemas que pue- den aparecer en un futuro a largo plazo”. · Sibol Sibol considera que “los operarios conocen dichos riesgos, pero no los valoran en su justa medida. Hay varios factores a tener en cuenta a la hora de formar al trabajador en el uso de un EPI. La evaluación de riesgos, conocer su puesto de · MSA