PROTECCIÓN LABORAL 59 | 2oTrimestre09 Confort, condición para la seguridad necesario, por ejemplo, un guante bien ajusta- do a la mano para mayor precisión o, por el contrario, un guante más amplio, que permita diferentes movimientos sin fatiga y que facili- te el trabajo. El color del guante puede provo- car rechazo por tener connotaciones sexistas o relacionadas con el tipo de trabajo. Con el fin de atender gustos y necesidades diversas, los fabricantes han desarrollado extensas gamas de producto, lo que puede aumentar la complejidad de la elección. Además de la consideración de los riesgos y las prestaciones que hay que exigir de los guan- tes, hay que tener en cuenta otros factores no menos importantes, como son: - Agarre. Una deficiencia en este aspecto puede representar un serio peligro, que abo- cará al trabajador a padecer accidentes por errores en la seguridad de la manipulación. - Destreza. Ésta suele ser determinante en muchos trabajos, y sería paradójico tener que quitarse el guante (y quedar desprote- gido) para poder realizar bien el trabajo. Para los trabajos delicados, existen guantes de ajuste elevado que cumplen con su cometido y no limitan el sentido del tacto y la libertad de movimientos. - Comodidad. Los guantes que no se usan no sirven para nada. Para evitar que el usuario prescinda de la adecuada protección de sus manos, los guantes deben de ser cómodos. La ergonomía es uno de los caballos de bata- lla de los fabricantes y, consecuentemente, uno de los capítulos a los que mayor aten- ción se presta. - Longitud. La longitud de los guantes es importante, sobre todo cuando de ello depende también la seguridad del antebra- zo. La solución siempre es crítica, pues la longitud es inversamente proporcional a la aireación de la mano. Así, un guante muy largo dificultará la circulación del aire, dis- minuyendo, por tanto, la comodidad de uso. - Color. Según la tabla de códigos de color, se emplea el azul para procesamiento de alimen- tos (si un trozo de guante acabara en la comida, este color siempre sería fácilmente detectable). Es muy importante pedir el asesoramiento de los fabricantes y tener presente que la funcionalidad y el confort dependen de numerosas propiedades del guante. La forma, su precisión respecto a la morfología del usuario, la existencia de diversidad de tallas, la utilización de materiales flexibles y elásticos son determinantes en la preserva- ción de la destreza, la utilización durante periodos prolongados sin fatiga de la mano y la facilidad de manejo. La sensibilidad táctil depende principalmente del espesor del guante en la punta de los dedos. Guantes inocuos El uso inadecuado de los guantes puede acarrear problemas dermatológicos, que sólo pueden evitarse con una higiene ade- cuada y erradicando prácticas de riesgo (uso de los guantes con las manos sucias, intercambio con otros trabajadores, etc.). Observando estas sencillas reglas, puede afirmarse rotundamente que los guantes de Showa resultarán cien por cien inocuos y, por tanto, pasar desapercibidos. Es bien sabido que el calor y la transpiración natural de la piel son una fuente de problemas. Pero un guante que actúa realmente como una segunda piel tiene un elevado poder de eva- cuación del sudor. Como ejemplo, sólo hay que pensar en el modelo Temres, un guante de tejido de nylon, sin costuras, con doble reves- timiento de poliuretano (espuma + película). Su estructura inédita le permite combinar, por primera vez, impermeabilidad y transpirabili- dad en el mismo guante. La experiencia de Showa ratifica la eviden- cia de que la utilización de materiales absor- bentes y no estancos y los guantes de dorso aireado contribuyen al confort de la mano enguantada. En el caso de guantes de pro- tección química (que son estancos), el pro- blema es más peliagudo, ya que nos vemos frecuentemente abocados a intolerancias o degradaciones cutáneas debidas al fenóme- no de obstrucción (oclusión). Los guantes que incorporan un revestimiento interior en algodón flocado pueden representar una solución para las pieles frágiles. A modo de conclusión, subrayamos que la elección del guante ideal deberá tener en cuenta todos los riesgos percibidos, así como las dificultades relacionadas con el puesto de trabajo y la fisiología del perso- nal implicado. La protección y la comodi- dad ya son atributos de cualquier EPI ele- vados a la categoría de ‘sine qua non’. Dpto. Marketing de Tomás Bodero, S. A.