PROTECCIÓN LABORAL 58 | 1oTrimestre09 Soldadura, riesgos y prevención • Riesgos ergonómicos A los anteriores, hay que añadir los riesgos de carácter ergonómico, por cuanto “muchas soldaduras no se realizan en talle- res donde, generalmente, pueden llevarse a cabo en condiciones controladas, sino sobre el terreno, en la construcción o repa- ración de grandes estructuras y maquina- rias (p. ej., estructuras de edificios, puentes y torres, barcos, locomotoras y vagones ferroviarios, maquinaria pesada, etc.). El soldador puede tener que llevar todo su equipo al lugar de trabajo, instalarlo y tra- bajar en espacios confinados o sobre anda- miajes. La necesidad de estirarse, arrodillar- se o trabajar en otras posturas forzadas e incómodas puede provocar tensión física, fatiga excesiva y lesiones musculo-esquelé- ticas. El trabajo en tiempo caluroso y los efectos oclusivos del equipo de protección personal pueden ocasionar estrés por calor, incluso sin el calor generado por el proceso de soldadura”. • Gases a presión y generadores de acetileno En las instalaciones de soldadura con gas a alta presión, el oxígeno y el gas combusti- ble (acetileno, hidrógeno, gas natural, pro- pano) se suministran a la antorcha desde botellas. Los gases almacenados en estas botellas están a elevada presión. El riesgo inherente a los gases combustibles es el de incendio y explosión. Al elegir el lugar donde se ejecutarán las operaciones de soldadura se tendrán en cuenta las paredes circundantes, suelos, objetos cercanos y material de desecho. Siempre se deberán tener a mano extinto- res adecuados. Si se trata de una planta de baja presión en la que se utilice un gene- rador de acetileno, se deberán tener pre- parados también cubos de arena seca; los extintores de polvo seco o dióxido de car- bono también son válidos. Nunca deberá usarse agua. • Riesgos eléctricos Aunque en la soldadura al arco manual las tensiones en vacío son relativamente bajas (del orden de unos 80 V o menos), las corrientes de soldadura son elevadas, y los circuitos primarios de los transformadores presentan los riesgos habituales de los equipos que funcionan a la tensión de red. No deberá pasarse por alto, pues, el riesgo de electrocución, especialmente en espa- cios estrechos o posiciones inseguras. • Riesgos químicos En la soldadura y el oxicorte se producen contaminantes atmosféricos, como humos y gases, procedentes de diversas fuentes. Entre éstas: -El metal que se suelda, el metal de la varilla de aportación o constituyentes de diversos tipos de acero, como acero al níquel o al cromo. -Cualquier recubrimiento metálico del ele- mento que se suelda o de la varilla de metal de aportación (p. ej., zinc y cadmio proce- dentes del recubrimiento electrolítico, zinc del galvanizado y cobre en forma de una del- gada capa de recubrimiento en electrodos continuos de aportación de acero suave). -Pintura, grasa, residuos y otros contaminan- tes por el estilo presentes en la superficie del elemento que se suelda (p. ej., monóxido de carbono, dióxido de carbono, humo y otros productos de descomposición irritantes). -Capa de fundente sobre la varilla del metal de aportación (p. ej., fluoruro inorgánico). -La acción del calor o la luz ultravioleta sobre el aire circundante (p. ej., dióxido de nitró- geno, ozono) o sobre hidrocarburos clora- dos (p. ej., fosgeno). -Gas inerte utilizado como atmósfera protec- tora (p. ej., dióxido de carbono, helio, argón). ·Vapores de metal Provocan fiebres en los trabajadores expues- tos a vapores de zinc en el proceso de galva- nización o estañado, en la fundición de latón, en la soldadura de metal galvanizado y en la metalización o rociado de metal, así como por exposición a otros metales, como cobre, man- ganeso y hierro. Es una afección aguda que se manifiesta varias horas después de la inhala- ción de partículas de un metal o sus óxidos. Comienza con mal sabor de boca seguido de sequedad e irritación de la mucosa respirato- ria que provoca tos y en casos aislados disnea (sensación de falta de aire) y “rigidez” toráci- ca. Estos síntomas pueden ir acompañados de náuseas y dolor de cabeza, y unas 10 a 12 horas después de la exposición, escalofríos y fiebre, que puede ser muy alta. Los síntomas duran varias horas y van seguidos de transpi- ración, somnolencia y, a menudo, poliuria (gran cantidad de orina) y diarrea. • Espacios confinados La entrada en espacios confinados puede entrañar el riesgo de que la atmósfera sea explosiva, tóxica, deficitaria en oxígeno o presente distintas combinaciones de estas deficiencias. Cualquier espacio confinado de este tipo deberá ser certificado por una persona responsable como seguro para entrar y realizar en el mismo trabajos con arco o llama. Como ejemplos de espacios confinados, podemos mencionar, entre otros, los pozos de registro, cámaras aco- razadas, bodegas de buques, etc. La venti- lación de los espacios confinados es vital ya que la soldadura con gas, además de producir contaminantes atmosféricos, consume oxígeno. • Ruido El ruido es un riesgo en varios procesos de soldadura, como la soldadura con plasma, algunos tipos de máquinas de soldadura por resistencia y la soldadura con gas. En la soldadura con plasma, el chorro de plas- ma es expulsado a altísimas velocidades, por lo que produce un ruido intenso (hasta 90 dBA), especialmente en las ban- das de alta frecuencia. Asimismo, el empleo de aire comprimido para eliminar el polvo produce altos niveles de ruido. En estos casos es preceptivo usar tapones o cascos protectores (orejeras). *Manuel Domene Coordinación editorial del Monográfico “Los riesgos de la soldadura” *FOTOGRAFÍAS gentileza 3M. División protección personal