Entrevista  PROTECCIÓN LABORAL 55 | 4oTrimestre08 ¿Constituye un problema para el sector el empleo por parte de los trabajadores y las empresas de materiales improvisados como líneas de vida o no homologados? D. C. Por supuesto que sí, no sólo es que sea un problema, sino que en nuestro sec- tor, además, este problema es grave porque afecta a la seguridad del trabajador vertical. La utilización de equipos, componentes o elementos no homologados está totalmen- te prohibida en nuestra actividad. Sí que es cierto que todavía en nuestra actividad, y ANETVA lucha contra ello, sigue habiendo trabajadores y empresas que utilizan equi- pos, componentes o elementos no homolo- gados, o que incumplen la normativa de seguridad, como por ejemplo al utilizar arneses de cintura. Esto es cierto, pero cada vez es menor el número de empresas y trabajadores que lo siguen haciendo. Un aspecto importante de ANETVA para erradicar estos hábitos son los cursos formativos que imparte, así como la labor informativa que realiza, no sólo con circulares o boletines, jornadas técnicas, etc., sino también desde el punto de vista del trabajo que realiza al colaborar con la Administración Pública competente en la elaboración de la normativa de aplicación a esta actividad. En este sentido, pueden citar- se nuestras aportaciones, por ejemplo, al Real Decreto 2177/2004, la futura Guía Téc- nica, las notas técnicas del INSHT, etc., que constituyen el ordenamiento normativo al que se encuentran sujetas todas las empre- sas de trabajos verticales. ¿Qué evolución prevé para el mercado de las instalaciones de seguridad en altura y, más concretamente, para la actividad de los traba- jos verticales? D. C. Toda previsión de futuro podemos decir que tiene algo de adivinatorio y, por tanto, tiene su riesgo, pero basándonos en la evolu- ción de la actividad en los últimos seis años, periodo en que ha sido muy importante, no sólo en lo que respecta a la propia actividad, sino también en lo que afecta a la propia Aso- ciación, que se ha consolidado como referen- te de la misma, nos podemos atrever a decir que el futuro se ve con optimismo. Los trabajos verticales como actividad no son fruto de una moda o de una novedad repenti- na. Esta actividad se viene desarrollando desde hace más de 15 años, y desde entonces no ha dejado de crecer y evolucionar. En los últimos años, como se indica, se ha producido un gran crecimiento en todos los sentidos, seguramente apoyados por la normativa, la bonanza económica, la evolución de equipos, materiales, la formación, etc., pero lo que sí es cierto es que ahora se conocen y se aceptan. Ya no es raro ver a un trabajador vertical sus- pendido en la fachada de un edificio o en otro lugar. Esta actividad tiene futuro porque da respues- ta a una necesidad que, de otra forma, no se podría atender o resolver. Es consciente de cual es su lugar y de las limitaciones que tiene y que se le imponen, estas últimas, muchas veces, inmerecidamente e injustificadamente ya que, y dicho desde el máximo respeto, muchas veces, por desconocimiento o por determinados intereses, se trata de despresti- giar y limitar. Los trabajos verticales son una actividad pro- fesional que tiene y debe seguir teniendo su espacio en el mercado laboral, económico, social, etc., y esto se verá corroborado en un futuro próximo con hechos como la aparición de una Guía Técnica sobre la actividad, que realizará el Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo, con la regulación y reconocimiento de la profesión de trabajador vertical, etc., es decir, hechos que auguran un futuro optimista para la actividad . ¿Es un negocio goloso, susceptible de atraer a “oportunistas”? D. C. Yo no hablaría de “oportunistas”, sino de intrusos temporales, que no tienen voluntad de permanencia en la actividad, aunque existen mecanismos que contribu- yen a la auto-regulación de este mercado como de cualquier otro. Podemos admitir que las empresas que eje- cutan trabajos verticales se están asentando en el mercado y creciendo en su actividad. La demanda de los trabajos verticales como actividad, en los últimos años, ha hecho que aparezcan multitud de empresas pequeñas o de pequeños autónomos que realizan estas técnicas de trabajos vertica- les, que indiscutiblemente contribuyen y han contribuido al crecimiento de la activi- dad. Pero, de cara al futuro, es posible que se dé un reajuste, es decir, que la actividad, al igual que puede ocurrir en otros secto- res, se asiente de manera que el crecimien- to de la misma y del número de empresas se estabilice, en ello pueden contribuir determinados parámetros como la futura situación económica del sector de la cons- trucción, la lucha contra la competencia desleal, uno de los males de esta actividad, o la falta de mano de obra especializada. Como en otros ámbitos, asistiremos a un proceso de selección natural que acabará separando el grano de la paja. Trabajos Verticales Se denominan Trabajos Verticales a técnicas, derivadas de la escalada, que sirven para trabajar en altura. Dichas técnicas se basan en la utilización de cuerdas, anclajes y apa- ratos de progresión para acceder a cualquier punto o lugar con el fin de realizar algún tipo de trabajo (reparación, pintura, limpieza, mantenimiento...). En los trabajos ver- ticales el protagonismo recae sobre el factor humano y su formación (montañistas y escaladores), así como la absoluta especialización de las empresas que operan en el sector. Los trabajos verticales, que se encargan de las obras en altura, en zonas de peligro o de difícil acceso sobre edificios, monumentos, torres, chimeneas, etc., permiten pres- cindir de estructuras caras y costosas como andamios, grúas o plataformas elevadoras. Además, las técnicas de acceso vertical que emplean estos profesionales confieren mayor movilidad, obteniéndose una considerable reducción de los costes en las obras. Algunos de los trabajos verticales más comunes actualmente son el mantenimiento y pintado de fachadas, limpieza de cristales en edificios, limpieza de chimeneas, mante- nimiento de estructuras altas (torres de comunicaciones, puentes, presas de panta- nos...), desmontaje de torres de alta tensión, etc.