Técnicas de protección PROTECCIÓN LABORAL 50 | 1oTrimestre07 Cuidado de las manos en el sector del metal Las manos, útil de la creatividad humana El sector del metal es muy amplio y heterogéneo, ya que podemos incluir en el mismo diferentes subsectores, desde la producción (fundiciones) a la distribución de productos (sector detallista, ferreterías y suministros industriales), pasando por las múltiples actividades de transformación del metal (industria del automóvil, electrodomésticos, carpintería metálica, herrería y forja, joyería, etc.). Todos ellos tienen el común denominador de trabajar con metales o, lo que es lo mismo, afron- tar unos riesgos elevados para la seguridad de las manos. Tomás Bodero Sáiz* La lista se repite contumazmente, son riesgos de naturaleza mecánica, térmi- ca, química y eléctrica. Los mismos se evitan cambiando la organización del trabajo o, si ello no es posible, se minimizan con el empleo de EPI, entre los que nunca pueden faltar los guantes. Sin el debido cuidado esta- remos atentando contra el mejor “periféri- co” de nuestro cerebro, las manos, los útiles que plasman, modelan y dan vida a la creati- vidad del hombre. La fusión y la transformación del metal Son los procesos de creación y transforma- ción del metal los que concentran los ries- gos para las manos del trabajador. Diferentes aleaciones de minerales, el fuego y el ingenio humano permiten obtener el metal en las fundiciones. Es una práctica milenaria que, pese a la mejora de las técnicas, compor- ta numerosos riesgos. Los artífices de esas barras de metal incandescente, que atrapan la atención de nuestras retinas por su vistosi- dad, están expuestos a la proyección de partí- culas candentes, atrapamientos, quemaduras en manos y otras partes corporales por la manipulación de piezas, heridas, cortes o lesiones al intervenir sobre las mismas. Al tra- tarse de una industria pesada, la mecaniza- ción resuelve las operaciones más penosas. No obstante, en el proceso siempre ha de intervenir la acción de las manos. El metal en bruto, normalmente en láminas, debe procesarse para obtener los productos (una llave, una bicicleta o una lavadora). Dicha transformación se lleva a cabo con el empleo de grandes máquinas-herramienta y herramientas manuales que, nuevamente, son fuente de riesgos. En la industria del metal se emplean equipos como el compre- sor, sierras alternativas (o de vaivén), cizalla universal, plegadora, prensa mecánica, tala- dro de mesa, torno horizontal, fresadora, esmeriladora, amoladora. Aunque de graves consecuencias, no son las grandes máquinas-herramienta -que cuentan con numerosas protecciones- las que provo- can mayor número de lesiones. El trabajador debe extremar la precaución con el uso de herramienta manual y electro-portátil. La manipulación de herramientas tales como martillos, destornilladores, alicates, llaves diversas, etc., resulta habitual porque muchas de las operaciones sólo pueden lle- varse a cabo de forma manual. Aunque apa- rentemente resulten inofensivas, cuando se usan de forma inadecuada llegan a provocar lesiones (heridas y contusiones, principal- mente) que de modo ocasional revisten cier- ta consideración, hasta el punto de que un 7% del total de accidentes, y un 4% de los calificados como graves, tienen su origen en la manipulación de una herramienta manual. Las causas que provocan estos accidentes son muy diversas, pudiendo citarse como más significativas una calidad deficiente de las herramientas, utilización inadecuada para el trabajo que se realiza, falta de expe-