EMPRESAS tiempo se han quedado por el camino parte de nuestra compe- tencia, cosa que ha ayudado que nuestra posición en el mercado haya mejorado”, explica. ‘Know-how’ que viene de lejos Aunque Productos Climax está creada en 1984, las raíces de la empresa vienen de hace más de 50 años atrás. La factoría original se dedicaba a fabricar productos para motoristas, como gafas o cascos. Con el paso del tiempo, la empresa crece, se especializa y empieza a incorporar también dentro de su catálogo equipamiento deportivo: raquetas de tenis, sticks de hockey, y gafas y cascos para otras actividades deportivas como esquí o el polo. “En esta época se identificaba Climax más que nada en el mundo de la moto”, explica Israel. Entre los años 80 y 90, empieza a adquirir renombre los cascos y las gafas Climax, sobre todo a través de corredores de motociclismo que promocionaron la marca. Tras una época de cri- sis económica, la empresa no pueda mantener su situación y en ese momento, fueron los propios trabajadores los que se quedaron con la empresa a través de una sociedad cooperativa. “En ese momento empezó una nueva etapa, con una nueva idea para y por la empresa. Se dieron cuenta que debían cambiar el perfil de producto que se había fabricado hasta entonces y aprovechando la capacidad productiva a nivel de inyección que poseía la fábrica, se inició la fabricación de equipos de seguridad”. Se empezó esta nueva andadura con un casco de protección, un protector de oído, una pantalla de soldar y un arnés, productos que en aquel momento empezaban a darse en el mercado y eran obligatorios en los puestos de trabajo. “Y se empezó la andadura con la filosofía que todo lo que se vendiera se iba a fabricar aquí, porque había una capacidad productiva y no se iba a desaprove- char este factor. Se empezó poco a poco con el mismo tiempo ha hecho que la evolución del producto sea nuestro portfolio actual. En un principio, el abanico de producto era limitado, con uno o dos modelos por producto que tenemos ahora, y a día de hoy tenemos un catálogo de 130 páginas”, explica Israel García. Entonces, ¿de dónde surge esta capacidad de innovación? “Gracias al know-how que hemos adquirido durante todo este tiempo tenemos este potencial que nos permite seguir creciendo. Tenemos muchos actores a nuestro alrededor que son muy buena competencia y nos encanta estar dentro de este mercado porque cada día tratamos de incorporar producto nuevo y mejorar nuestro producto, por- que para nosotros es esencial tener la capacidad de innovar por ti mismo, no depender de terceros que te hagan el producto. Esto es lo que nos permite, pasito a pasito, ir creciendo como marca, ir esta- bleciendo nuestra empresa dentro del mercado para que el usuario nos identifique con la calidad y durabilidad, precio competitivo y como una empresa que no se pone límites para ir incorporando pro- ducto a nuestra gama”, explica Israel. “Innovamos gracias a nuestro know-how, pero también recibiendo siempre el feedback de nues- tro cliente, que es el distribuidor o el especialista, pero escuchando siempre al cliente final por boca del distribuidor, o en ferias o cursos de formación. Son ellos los que te hacen mejorar tu propio producto y los que comunican el tipo de necesidades que se suelen dar y noso- tros, dentro de nuestras capacidades, el siguiente producto que vamos a incorporar Climax, va a estar hecho en función de estos comentarios que nos han llegado. Eso sí, lo más estándar posible y 83 Ensamblaje de semielaborados en la planta de Clímax.