25 ETIQUETADO DEL ENVASE En la década de 1970, la industria farmacéutica y el sector del whisky y el coñac dieron un impulso fun- damental a nuestro sector para entrar en el mercado de las bebidas. En la actualidad, aparte de whiskys y co- ñacs de la mejor calidad, las etiquetas autoadhesivas ador- nan botellas de otras bebidas alcohólicas y de una enorme selección de vinos, desde cosechas muy apreciadas hasta marcas que encontramos en el supermercado. ¿Qué es una etiqueta autoadhesiva? La etiqueta autoadhesiva es una lámina cuya composición puede variar de manera casi ilimitada, formada por tres ele- mentos principales: el material de superficie (la etiqueta impresa), una capa adhesiva y una capa protectora / antiad- herente. La etiqueta se imprime en máquinas de imprimir de bobina estrecha de última tecnología, que pueden producir con las técnicas de impresión habituales, así como con offset digital y transferencia térmica o inyección de tinta para los có- digos de barras y las características de autenticación. Por úl- timo, las etiquetas autoadhesivas, protegidas por la capa antiadherente, se pegan a las botellas de forma rápida y au- tomática mediante aplicadores de gran precisión. Incluso es posible aplicar varias etiquetas —delantera, posterior y en cuello, si se imprimen juntas sobre un mismo papel antiad- herente— en la botella en una sola pasada. Efecto ‘invisible’ Después del éxito con las bebidas alcohólicas ‘doradas’, el sector lanzó una lámina autoadhesiva de plástico transpa- rente que podía revestirse con adhesivo, imprimirse y apli- carse en botellas de vidrio transparente, lo que proporcionó un efecto ‘invisible’ y permitió entrar en el segmento de las ginebras, los vodkas y otras bebidas blancas. Para los fabricantes, esta solución permitió incorporar mensajes im- presos en la etiqueta (texto y diseño en las partes delantera y posterior, por ejemplo) que se hacían visibles al girar la botella. Hoy en día, estas láminas de plástico transparente y su look ‘invisible’ se han convertido en la solución están- dar en las bebidas blancas. Vino: un mundo de posibilidades de etiquetado Para completar el dibujo, las etiquetas autoadhesivas se han consolidado recientemente en el sector del vino. De- bido al amplísimo abanico de tipos de material de superfi- cie y adhesivo, el impresor de etiquetas autoadhesivas puede crear con facilidad una etiqueta adecuada a ␣las ne- cesidades concretas de cualquier productor de vino, tanto en términos de estética como de funcionalidad. En la década de 1970, la industria farmacéutica y el sector del whisky y el coñac dieron un impulso fundamental a nuestro sector para entrar en el mercado de las bebidas Si, por ejemplo, el productor de vino necesita una etiqueta con un aspecto antiguo y una textura bonita para una co- secha especial, la tecnología de etiquetado autoadhesivo puede proporcionársela, incluso en tiradas muy cortas. Y lo que es más, la etiqueta —que se suministra con una capa antiadherente de protección— puede revestirse con un adhesivo que se mantiene intacto, sin manchar, mien- tras la botella esté almacenada y que resiste la acción de los hongos y la humedad mientras el vino añeja en la bo- dega. En la actualidad, los fabricantes de material para eti- quetas autoadhesivas han desarrollado numerosos tipos de soportes de papel especiales para los requisitos de la industria del vino. Hay papeles con textura, lisos, metaliza- dos, o sustratos que contribuyen a la conservación del medio ambiente, como papeles reciclados o soportes ela- borados a partir de fibras de caña de azúcar reutilizadas tras la extracción del azúcar. panorama