Iberobalance, de Bayer, combina bífidus (Bi dobacterium longumspplongum R0175) y bra natural para la reeducación del intestino. El producto contiene una alta concentración de bra de centeno. del Hospital Vall d’Hebron de Barcelona: “Desde que han desapa- recido las enfermedades infecciosas han crecido las alergias; en África, donde la eliminación bacteriana ha sido menos radical, siguen sufriendo enfermedades aquí extinguidas, pero se libran de otras que entre nosotros proliferan como el asma, alergias, síndrome de Crohn, esclerosis múltiple, diabetes tipo 1 o intolerancias alimenta- rias como la celiaca”. La falta de biodiversidad resta efectividad al sistema inmunológico y por eso los celíacos, por ejemplo, identi can erróneamente el gluten como invasor. En el vínculo entre la microbiota intestinal y el resto del organismo se pueden encontrar respuestas para enfermedades degenerativas, cambios de humor, enfermedades crónicas e incluso perinatales. Hoy, la investigación en probióticos busca cómo modi car las comunidades microbianas para proporcio- nar un equilibrio siológico a nuestro organismo, mejorar patologías concretas y optimizar la respuesta a determinados fármacos. En simbiosis desde el nacimiento Tenemos más bacterias que células; estos microorganismos con- tribuyen con sus genes (genoma bacteriano) a múltiples funciones metabólicas con impacto en nuestra salud. Además de la microbiota intestinal también existe la oral, la del tracto genitourinario, e incluso la leche materna y la piel son consideradas como tales. La coloni- zación se produce durante del parto (cuando es vaginal) y con el primer aliento, y de ella dependerá buena parte de la salud futura del nuevo ser. Entre las funciones de nuestra microbiota intestinal gura la metabólica, como la absorción de determinados nutrientes, síntesis de vitaminas esenciales (como la K y algunas del complejo B) y aumento de absorción de minerales, entre otras, a través de la fermentación de todos los productos de nuestra dieta que no son digeribles (carbohidratos complejos) y que sirven de alimento a las bacterias. Por otro lado, esa bola de 700 gramos de bacterias da instrucciones al sistema inmunitario para que reconozca antígenos y decida si son peligrosos y deben ser eliminados o, por el contrario, deben ser tolerados. La microbiota también tiene efectos tró cos, esto es, sobre el desarrollo y el crecimiento del resto del cuerpo. El goteo de descubrimientos en relación a la importancia del microbioma ha despertado el interés por el desarrollo de productos con probióticos, prebióticos y simbióticos (la combinación de ambos), que tienen por objetivo repoblar o alimentar, respectivamente, aquellas bacterias que nos bene cian. Los probióticos pueden formar parte de la com- posición de distintos tipos de productos, como alimentos funcionales, medicamentos y complementos de la dieta. La ingesta de probióticos también logra, mediante la reducción del pH del medio y la producción de compuestos antibacterianos, reducir la adherencia, la replicación y la acción de la ora potencialmente patógena para el hospedador. El término probiótico se introduce en 1965, bajo la de nición de “microorganismos vivos que cuando se ingieren le con eren a la persona bene cios para su salud”. En la actualidad su de nición completa es mucho más especí ca: “Microorganismos vivos (deben El goteo de descubrimientos en relación a la importancia del microbioma ha despertado el interés por el desarrollo de productos con probióticos, prebióticos y simbióticos, que tienen por objetivo repoblar o alimentar aquellas bacterias que nos bene cian >>27 PROBIÓTICOS