COSMÉTICA 10 fisiológicos cutáneos de manera análoga a como lo harían los pro- pios péptidos presentes en el cuerpo humano. Estas moléculas son capaces tanto de activar como de anular los resultados de las rutas metabólicas en las que participan”, o la ficocianina y la fotoliasa, “dos enzimas –prosigue nuestro interlocutor– que per- miten la reparación del ADN del daño causado por las radiaciones solares. La fotoliasa corrige y repara el ADN mediante la ruptura y reparación de enlaces timina-timina de la doble hélice de ADN, se activa con la luz solar y repara un 50% del daño en el ADN en 30 minutos: 100 veces más rápida que las enzimas corporales. La ficocianina, por su parte, es un potente antioxidante que bloquea las especies reactivas de oxígeno (ROS) y las especies reactivas de nitrógeno (RNS), responsables de activar la cadena inflamato- ria”, concluye. La doctora Susana Puig, jefe de Dermatología del Hospital Clínic de Barcelona, por su parte, también aporta detalles sobre la foto- liasa, que –explica– “en aplicación tópica repara los dímeros de pirimidina (premutación en el DNA producida por la radiación UV); es una enzima muy extendida en el mundo vegetal y animal pero que han perdido los mamíferos”. Y por lo que a tecnología respecta, se trata de un factor primordial en esta nueva era de cosmética precisa y esencialista, persona- lizada, casi a medida. Desde Martiderm, Gina Puig argumenta que “las nuevas disciplinas permiten identificar moléculas más activas a través de soporte informático; esto hace posible defi- nir mejor las moléculas diana para un tipo de receptor y de este modo facilitar la selección de los activos más eficaces. La gestión masiva de datos ofrece una información preliminar para identifi- car los mejores activos para una función determinada. Además, la aparición en el mercado del concepto ‘cosmética personalizada’ obliga al desarrollo de técnicas, incluso de análisis genético, para poder recomendar un tipo u otro de producto cosmético, adaptado totalmente al tipo de piel y a su predisposición a deter- minadas patologías dermatológicas. Hay algunos activos que se tecnológicos han revolucionado el sector, tanto desde el punto de vista de la actividad y acción de los principios activos como de la obtención de éstos; la biotecnología y la genética ya son pilares básicos en nuestro sector. En cuanto a los avances bio- tecnológicos, para el diseño y la obtención de activos –como el ácido hialurónico, cuya obtención por medios biotecnológicos ha permitido grados de pureza muy superiores que por las vías tradicionales, así como mejorar su eficiencia en la fabricación–; los avances en genética, por la capacidad de los nuevos activos en la reparación de daños en el genoma o por inducir cambios en la cadena de ADN intracelular y la consecuente replicación celu- lar, y los tecnológicos, referido a todas las herramientas de que disponemos para el análisis del estado de la piel, así como para el registro de hábitos de vida saludables”. Como ejemplos de nuevos principios activos que vienen a aña- dirse al elenco de componentes con los que trabaja la industria cosmética, cabe citar los péptidos biomiméticos, “moléculas –nos explica Xalabarder– capaces de intervenir en los metabolismos Marc Xalabarder, director general de Neftis Laboratorios y Esperança Figuerola, responsable de I+D.