REPORTAJE por esto. Sin embargo, se trata cla- ramente de una inversión a medio– largo plazo que supondrá un ahorro en consumo al mismo tiempo que se generan beneficios para el medio ambiente. Personalmente, mantengo el compromiso de que todas las per- sonas que trabajamos en Ramos Catarino estemos formados, infor- mados y sensibilizados para velar, en primer lugar, por nuestra propia seguridad y la de nuestros compa- ñeros pero, no menos importante, por el medio ambiente y por la cali- dad y la sostenibilidad de las tareas que cada uno desempeñamos, actuando siempre de forma res- ponsable y ética. Creo que todas las empresas, y muy especialmente una cons- tructora, cuya actividad va a generar un enorme impacto medioambiental, tanto por cada nueva obra o de rehabilitación, como por los materiales que en ella se utilicen y por los sistemas de ahorro de energía que lleve implícitos, ha de mantener una apuesta clara y sin fisuras por el desarrollo sostenible y por una constante y proactiva política de responsabilidad social y medioam- biental. Una de las obligaciones de una empresa constructora es reforzar, cada día, su apuesta por materiales endógenos y su participación en proyectos dota- dos de energías renovables. La preocupación, de la mano de la innovación científica y tecnológi- ca, por mantenerse en la van- guardia para responder a cada desafío que se presente en este sentido ha de ser un imperativo. Trabajemos todos por ello cada día y en cada proyecto. 68 EDH