ARTÍCULO electricidad y calor capaces de admi- tirlo como combustible si se cumplen ciertas condiciones mínimas: • Un uso continuado del motor. • Disponibilidad constante de ele- vadas cantidades de aceites usados de cocina. • Un marco regulatorio estable de tarificación de la energía eléctri- ca generada. • Incentivos para el despegue de esta fuente de energía alternativa de generación distribuida. Adíadehoynosedantodaslas condiciones anteriores, y el aceite recuperado se destina en su totali- dad a la producción de biodiesel a través de la industria de transforma- ción aceites vegetales vírgenes, que presenta un marco regulatorio, unas infraestructuras de producción, y un mercado, estables y maduros. Los datos. En la Comunidad de Madrid, se estima que el aceite usado de cocina generado en el canal HORECA alcanza las 13.000 t/año, y en los hogares supera las 10.000 t/año (OILECO, 2012). Las recuperación para su aprovecha- miento energético es del 75% en el canal HORECA, e inferior al 8% en el sector doméstico (OILECO, 2012). Por tanto, cada año más de 10.000 t de aceite usado de cocina dejan de ser un residuo para trans- formarse en cerca de 8.500 t de biodiesel. O visto de otro modo, en Madrid se tiran por los desagües o se envían a vertedero más de 13.000 t de aceite, y se importa en su lugar 11.000 t de combustible líquido. Valorizar (recuperar para usos ener- géticos) todo el potencial de aceite usado de cocina de la Comunidad de Madrid (23.000 t), supondría algo más del 0,6% del total de gasóleos y gasoli- nas consumidos en la región (2.763.372 t de gasóleos, y 632.758 t de Gasolinas. Fuente: Balance Energético de la Comunidad de Madrid; Fundación de la Energía, 2010). El ciudadano debe saber que el margen de mejora es amplio, que la fuente de energía está al alcance, y que la tecnología está disponible. Se trata de una cuestión de actitud y de concienciación social, cuya base es asumir que: • Los aceites usados de cocina no deben tirarse por el desagüe, sino que deben llevarse a los puntos de recogida. • Los costes medioambientales y los de gestión de las redes de alcantarillado recaen en última ins- tancia sobre el ciudadano. • Su adecuada gestión desemboca en una fuente de energía limpia y autóctona. Cuantos más ciudadanos se habi- túen a usar los puntos limpios, los gestores de este residuo podrán aumentar las redes de recogida sien- do así más accesibles y cercanas a las viviendas. La cadena de valor desde la recogida hasta la valorización del aceite usado de cocina genera puestos de trabajo. Y es que “Nadie comete un error mayor que aquel que no hace nada porque sólo puede hacer un poco” (Edmund Burke). El proyecto OILECO nace en el seno del programa europeo de sub- venciones “Intelligent Energy Europe IEE” (Convocatoria 2010) y tiene como objetivo principal el fomento de relaciones público-privadas para la valorización energética de los aceites usados de cocina. Además del socio español, participan siete socios de: Austria, Bélgica, Bulgaria, Italia, Hungría y Eslovaquia. Esta iniciativa europea está coor- dinada en España por la Fundación de la Energía de la Comunidad de Madrid en representación de la Dirección General de Industria, Energía y Minas, y los logros que de ella se derivan suponen significati- vos beneficios energéticos, ambien- tales y socio-económicos para la región. Durante este periodo (2011- 2013) se están llevando a cabo dife- rentes acciones a escala regional que promueven la correcta gestión de este residuo doméstico para su valorización energética. Estas medi- das no objetivo 20/20/20 de reduc- ción de emisiones GEI, reducción de consumo energético, y de incre- mento del empleo de fuentes reno- vables de energía. 28 EDH