MEDIO AMBIENTE 62 Emergencia climática: cómo reducir la generación de CO2 En muchos procesos industriales se necesita calor para fabricar. Ese calor se genera “quemando” combustibles, gas, fuel, biomasa, etc. Hay diversas formas de transmitir / transportar calor: vapor, aceite térmico, eléctrico, aire caliente, etc. Tecniq propone dos tecnologías probadas, eficientes y disponibles para reducir el consumo del vapor y recuperar hasta el 100% de la energía de los humos de combustión. David Navarro i Quintana, director técnico de Tecniq El vapor es uno de los fluidos más usados para transportar la energía en forma de calor. Se usa en todo tipo de industrias, alimentaria, bebidas, conservera, farmacéutica, cosmética, química, plásticos, cauchos, neumáticos, etc. Reducir generación de CO2, reduciendo consumo de energía Se distribuye el vapor a los equipos consumidores por una línea principal. Para que el vapor transmita la máxima energía que con- tiene, debe estar lo más seco posible, libre de gotas de agua que reducen su capacidad de transmisión. Después de los equipos con- sumidores y al ‘entregar’ la energía contenida, el vapor se condensa, se transforma en agua. La mayoría de los circuitos dispone de una red de retorno por la que se devuelven los condensados a la caldera para su reutilización. Para separar el condensado del vapor se utilizan purgadores de diferentes tipos para diferentes aplicaciones: termodinámicos, termostáticos, de boya, de cubeta invertida... Todos estos tipos de purgadores tienen un denominador común, son mecánicos. Para mantener en buenas condiciones las líneas de vapor y conden- sados, se deben mantener en buenas condiciones los purgadores, por lo que es recomendable hacer revisiones anuales para localizar los purgadores que están averiados o cerca de estarlo, y así se evita que: 1. Si el purgador de línea se bloquea o no purga bien, llegue agua a los equipos reduciendo su rendimiento 2. Si se bloquea el purgador del consumidor, se acumule agua en el equipo reduciendo su rendimiento 3. Si ‘fuga’ cualquiera de los purgadores, va a provocar dos efectos: a. Sobrepresión en la red de condensados que puede bloquear a los equipos de baja presión, y aumentará la presión en el depósito de condensados b. Fugas de vapor a la atmósfera, lo que quiere decir, fugas de euros a la atmósfera. Esto es de todos conocido, pues los purgadores mecánicos, como su descripción indica, tienen ‘mecanismos’, que con el tiempo se desgastan. Así, al usar purgadores mecánicos se deben revisar, substituir y reparar anualmente, asumiendo estos costes y, además, asumiendo también los costes ocultos de los purgadores que ‘fugan’ entre revisión y revisión. Un purgador DN25 a 6 barg que esté fugando, fuga 55 kg/h de vapor. Si trabaja 8.500 horas año, esto significa una pérdida econó-