ENERGÍAS RENOVABLES 28 tados o nuevos. Normalmente, la energía solar térmica contribuye un máximo del 20% del total de la calefacción suministrada. En cualquier caso, de utilizarse un almacenamiento estacional este porcentaje podría ascender hasta un 50% del total. Un ejemplo de este tipo es el sistema centralizado basado en bio- masa y con 680 m2 de colectores solares térmicos integrados en los tejados del distrito residencial de Valla Heber, en Suecia, que han sido instalados en el 2013. A la hora de implementar este tipo de tecnologías en ciudades se deben tener en cuenta dos obstáculos: la carga energética de la red de calefacción de distrito suele estar cubierta por excedente de calor proveniente de producción eléc- trica u otros y la dificultad para encontrar áreas suficientes donde colocar los colectores solares térmicos y su alto valor. Teniendo en cuenta estos factores, las ventajas que ofrece la instalación de calefacción solar térmica contrarrestan los obstáculos ya que la calefacción solar urbana: • Evita las emisiones de CO2 en los meses del verano al ser una tec- nología totalmente verde. • Permite alcanzar altos niveles de energías renovables en el sumi- nistro y ayudar así a conseguir los requisitos energéticos de la ciudad y el país. • Reemplaza sistemas de gas natural donde la producción de elec- tricidad combinada con calor durante los meses de verano no es posible. La calefacción solar urbana también es viable, a parte de en dis- tritos urbanos y ciudades, en comunidades rurales. Esto permite una transición energética más flexible haciendo uso de las fuen- tes de energía renovables disponibles a nivel local. Un ejemplo de este tipo de sistemas es el existente en Busingen, Alemania, donde un sistema de colectores de 1.090 m2 proporciona la totalidad de la capacidad térmica necesaria para calentar 100 edificios en los meses de verano, previniendo el incremento de costes que supondría mantener la operación de la caldera de biomasa de esta comunidad rural. Esta red lleva funcionando con éxito desde 2013. Uno de los más claros ejemplos de sistemas inteligentes de cale- facción urbana se encuentra en Gram, Dinamarca. Esta planta está equipada con 44.800 m2 de colectores térmicos, bombas de calor, La planta solar más grande del mundo hasta el momento está en Vojens, Dinamarca. Fuente: Vojens Fjernvarme. unidades de cogeneración, una caldera de electrodos y una caldera de respaldo de combustibles fósiles. La planta tiene un foso de agua que funciona como un sistema de almacenamiento de energía tér- mica que mide 122.000 m3 lo que permite una mayor flexibilidad en el uso en la generación para equilibrar la fluctuación de precios de la electricidad. La fluctuación de los precios de la electricidad son un grave pro- blema que afecta a la espina dorsal de las redes de calefacción, las plantas de cogeneración. Las plantas de calefacción solar urbana son un método eficaz para solucionar este contratiempo ya que ofrecen una mayor flexibilidad a toda la red. Un ejemplo de esto es el proyecto Big Solar que tiene lugar en Graz, Austria y mediante el cual, la calefacción solar urbana cubrirá al menos el 20% de la demanda de la red de calefacción urbana y permitirá la sostenibili- dad de suministro a toda la calefacción. A pesar del alto coste y la dificultad que en ocasiones supone encon- trar áreas disponibles para la colocación de colectores solares, bien es cierto que un acre de tierra puede producir un máximo de 2GWh de calor cada año. Esta es la forma más eficiente de generar energía renovable en términos de utilización de terreno. También se debe mencionar que el coste del suministro de la calefacción solar urbana es estable durante los primeros 25 años de operación de la planta entre 30-50 Euros/MWth. La relevancia de esta tecnología radica en el papel importante que ocupa para el éxito de la Unión Europea en la consecución de una transición energética efectiva para el sector de la cale- facción. Teniendo en cuenta el objetivo principal de la Unión Europea de crear una economía baja en carbono para 2050, abordar la demanda de frío y calor es una prioridad ya que representa más de la mitad del consumo total de energía final en centros urbanos. A este respecto, la SDH ofrece cuatro ventajas principales: no emite CO2 y ofrece un suministro 100% de energía renovable (lo que permite la máxima sostenibilidad del abastecimiento de calor), la energía solar es una fuente ilimitada y tiene un coste estable y com- petitivo, fijo en los primeros 25 años de operación. •