TRIBUNA DE OPINIÓN 88 Pablo Bascones Ilundáin, director de Sostenibilidad y Cambio Climático de PwC Creciente importancia de la gestión del carbono en las decisiones de inversión La economía mundial logró reducir la intensidad de sus emisiones de carbono un 2,6% en el 2016, lo cual supone una considerable mejoría respecto al 1% anual que se registraba hasta el año 2014. Así lo re eja la novena edición del estudio 'Low Carbon Economy Index: Is Paris possible?', elaborado por PwC, que recoge la evolución de los países del G20 en la reducción de las emisiones de carbono de sus economías. Sin embargo, tengamos en cuenta, tal y como se observa en el grá co 1, que la intensidad de emisiones (medida en térmi- nos de tCO /unidad de PIB) se encuentra muy lejos del 6,3% 2 de reducción anual requerido para no superar los 2°C jados en el Acuerdo de París, habiendo sido de apenas el 1,4% en los últimos 16 años. En caso de aplicar los objetivos que los países del G20 pre- sentaron en París, estaríamos hablando únicamente de una tasa de descarbonización del 3%, por lo que, aun considerando dichos Figura 1. La intensidad de emisiones se encuentra muy lejos del 6,3% de reducción anual requerido para no supe- rar los 2°C jados en el Acuerdo de París. compromisos, el esfuerzo debe duplicarse si queremos no llegar al límite de los 2°C. Es indudable que lograr este objetivo pasa por conseguir un cambio radical del modelo productivo. Según el informe, la economía española es una de las que más han reducido su intensidad energética. Tanto en 2016 -con un 5,8%-, como en lo que va de siglo -con un 2,4%-, su tasa de reducción de emisiones se sitúa por encima del promedio mundial –que