años. En ese sentido, en Alemania destaca la venta de Autobahn Tank & Rast Gruppe a Allianz Capital Partners por 2.200 millones de euros o la compra de la británica MRH por parte de Lone Star por 1.378 millones de euros. “Desde Livingstone Partners creemos que esta dinámica observada en los países de nuestro entorno bien podría verse replicada en el mercado español. Si bien no se espe- ran cambios significativos en la posición de liderazgo de los grandes grupos, muy probablemente seamos testigos en España de movimientos corporativos a corto plazo involucrando a operadores independientes y al resto de mayoristas”. Las operadoras mayoristas, en mejor posición Como sucede en situaciones de cambio, incluso en los disruptivos (como sucede con la movilidad, en particular en las grandes urbes), los principales actores, siempre que estén dispuestos a ser flexibles, se encuentran en mejor disposición para hacer frente a etapas de incertidumbre. Romero coincide y asegura que “las principales opera- doras del sector han diversificado mucho su actividad y en la actualidad son compañías multienergéticas. De esta forma dan respuesta a las limitaciones que se están esta- bleciendo, por ejemplo, en Madrid, a la circulación de los vehículos más contaminantes, y, además, se preparan para dar respuesta a la electrificación de la movilidad, que será más acusada en los principales núcleos urbanos de España. En definitiva, están buscando vías alternativas de negocio”. Es lo que están haciendo “las principales ‘majors’ internacionales, como BP, Shell, o Repsol y Disa por lo que respecta a compañías de capital español. Hay negocio también a largo plazo. Y también para las estacio- nes de servicio, porque los viajes por carretera se seguirán produciendo y en ellos será necesario repostar y también adquirir bebidas y comida”. Este cúmulo de circunstancias propicia que “estemos viviendo un momento muy intere- sante para el sector”. Pero, ¿dónde quedan los abanderados? Porque las decisio- nes tomadas en los despachos de las grandes compañías energéticas no siempre coinciden con los intereses de sus socios privados. Romero afirma que “hay grupos de esta- ciones de servicio que no son propiedad de operadoras y que en los últimos años han hecho mucho dinero a pesar del descenso en el consumo de carburantes que se vivió en los primeros años de la crisis económica. Estas compañías no están interesadas en vender sus negocios porque ven que su flujo de caja sigue siendo bueno, porque han reali- zado inversiones que deben amortizar y, en algunos casos, rentabilizar aún más. Este tipo de empresas no tienen prisa por vender, incluso están interesados en aumentar su red, bien de forma orgánica o mediante adquisiciones”, explica desde su despacho en Valencia. • “Países como Reino Unido, Francia o Italia llevan varios años inmersos en un proceso de consolidación de redes de ventas de carburante” se afirma en el documento de Livingstone Partners Un mercado a dos velocidades El sector español de las estaciones de servicio protagoni- za desde hace varios años un cambio a dos velocidades. Mientras que los puntos de venta integrados en las redes de operadores integrados en la AOP descienden lentamen- te, el incremento de las gasolineras bajo enseñas impulsa- das por otros mayoristas y, sobre todo, el de las reunidas bajo el epígrafe ‘Otras marcas’ crecen a un ritmo muy alto. Si en 2011 los mayoristas de AOP reunían a 6.511 puntos de venta, a finales de 2017 esta cifra había descendido a 6.323. Esta variación fue positiva en el caso de las estacio- nes de servicio integradas en redes promovidas por otros mayoristas, que en 2011 congregaban a 1.155 puntos de venta, cuando a finales de 2017 eran 1.404. La categoría que ha experimentado es ese periodo la ma- yor y más positiva variación ha sido la de ‘Otras marcas’, que pasó de reunir a 1.800 puntos de venta en 2011 a estar formada por 2.834 al finalizar el pasado año. Hiper/ supermercados también mostraron una evolución creciente (de 275 a 368), mientras que las cooperativas se mantu- vieron estables (568 en 2011, 566 en 2017). Estas variaciones, trasladadas a porcentaje, muestran que las estaciones impulsadas por los mayoristas integrados en la AOP representaban en 2011 el 63,15% del total, cuota que pasó al 55,0% a finales de 2017, una caída del 8,15%. En el mismo periodo, las gasolineras integradas en redes promovidas por otros mayoristas (UPI y otras) pasaron de controlar un 11,2% del mercado, una penetración que al cierre del pasado año era del 12,21%, un punto porcentual más. Por lo que respecta a las gasolineras propiedad y/o abanderadas por ‘otras marcas’, en 2011 ostentaban el 17,46% del mercado, una cuota que el 31 de diciembre de 2017 era del 24,65%, un aumento del 7,19%. Desde finales de 2011 al cierre de 2017, los puntos de venta minoristas de carburantes aumentaron un 11,50%. EstacionesdeServicio 15 ACTUALIDAD EN PRIMERA