Estos efectos están siendo cada vez más pronunciados, origi- nados por la demanda creciente de dispositivos electrónicos que trabajan a frecuencias más elevadas, a un más intensivo uso por parte de la población en general de dispositivos elec- trónicos como ordenadores, tablets, smartphones, electrónica en automóvil y a la miniaturización progresiva que va asociada a la evolución de estos equipos. Los equipos electrónicos de los que disfrutamos en la actualidad, con tamaños cada vez más reducidos y compactos producen un mayor factor de ruido eléctrico. Estas tendencias marcadas por la lógica de la evolución de las tecnologías y por la demanda creciente por parte de los con- sumidores en general hacen más necesario la necesidad de proteger estos componentes frente a las interferencias elec- tromagnéticas (EMI) para reducir los riesgos asociados a que dispositivos electrónicos puedan afectar a equipos electrónicos cercanos en su funcionamiento habitual en uso. El efecto de las interferencias electromagnéticas puede ser reducido o eliminado colocando un material apantallante entre la fuente del campo electromagnético y el componente sensible a la misma. Esta protección se puede conseguir mediante la producción de carcasas o piezas protectoras fabricadas a partir de materiales plásticos eléctricamente conductores. La conductividad eléctrica es un prerrequisito de los materiales plásticos para apantalla- miento EMI. Esto es debido al fenómeno físico en el que los campos eléctricos y los campos magnéticos variables inducen corriente en el material eléctricamente conductor. El apantallamiento electromagnético se compone de las contri- buciones a partir de la absorción y la reflexión, por lo que tanto la conductividad a lo largo del volumen del material protector como su espesor adquieren especial relevancia. Muy relacionada con el apantallamiento electromagnético es la protección frente a descargas electroestáticas (ESD) en equipos electrónicos. El fenómeno ESD es la transferencia incontrolada de cargas estáticas entre dos objetos con diferente potencial eléctrico. Para el fenómeno ESD la conductividad superficial es importante para permitir una rápida y controlada descarga de la carga estática generada. I+D 35