Ciudades más sostenibles Las ciudades inteligentes no son solo un sueño del futuro. Gracias a las soluciones innovadoras del Internet de las Cosas, muchas ya están activas y se están expandiendo rápidamente. En este caso, IoT es uno de los pilares de su funcionamiento, impulsando el desarro- llo de nuevos modelos de producción que recopilan datos de cómo se mueve una ciudad en el ámbito de los servicios públicos como el transporte, la iluminación, sistemas de riego, recogida de resi- duos, etc, para establecer métodos eficientes en el uso más de los recursos y desarrollar modelos de sostenibilidad de consumo que reduzca el gasto público. No obstante, para Aitor Jerez, de Sarenet, a pesar de que vemos claramente como utilizar IoT en los escenarios anteriores, "la ver- dad es que todavía se pueden desarrollar muchos servicios y no es raro ver concursos de idea promovidos por la administración como por ejemplo el reciente que ha lanzado la Diputación de Badajoz en forma de “reto IoT”. La iniciativa está orientada al despliegue de nue- vos y mejores servicios digitales. Uno de los focos importantes de actuación del proyecto es la propia Diputación y los Ayuntamientos, sobre todo con la idea de posibilitar una mejor atención al ciudadano en áreas como medioambiente, desarrollo sostenible y turismo. Además de lo anterior, como apunta Jordi Calvera, de Intersystems, el sector público y el energético están adoptando medidores inte- ligentes y redes inteligentes para equilibrar la oferta y la demanda de energía, establecer precios en tiempo real, identificar y corregir interrupciones del servicio y ahorrar en los costes de los clientes mediante el ajuste programático de los dispositivos conectados y su activación y desactivación en tiempo real. En el caso de la agricultura, un ejemplo es el puesto en marcha por Ibercaja para impulsar el sector. “Gracias a los dispositivos IoT insta- lados en el terreno y el análisis de los datos en la nube de Microsoft Azure, es posible conocer con precisión el momento óptimo para sembrar, regar, fertilizar o cosechar los cultivos, de manera que los agricultores pueden obtener una mayor trazabilidad de la pro- ducción de sus explotaciones. Además, los datos permiten realizar un consumo más eficiente de los recursos naturales, es especial del agua, algo clave en el momento actual”, explica el portavos de Microsoft, Luis Montero. IoT implica que todo objeto puede ser una fuente de datos, lo que está transformando la forma de producir, hacer negocios, la organización del sector público y el día a día de millones de personas Generando confianza en el mercado Hablar del Internet de las Cosas lleva inevitablemente a hablar de los riesgos asociados. La relevancia de la tecnología IoT como obje- tivo de posibles amenazas que comprometan su ciberseguridad y privacidad viene dada principalmente por el hecho de que esta tecnología utiliza y depende de elementos cotidianos (vehículos, aplicaciones de localización, sistemas inteligentes de cuidados médicos, etc.) con la capacidad de poder transmitir y procesar infor- mación a través de internet. En muchas ocasiones, sobre todo las pequeñas empresas, no son conscientes del peligro que suponen los dispositivos IoT ni del alcance que puede llegar a tener un ciberataque a través de ellos. “Un ataque puede afectar y hasta inhabilitar servicios críticos, muy especialmente, teniendo en cuenta que el número de dispositivos conectados va en aumento, más allá de peligros más “clásicos” como el phishing o los referentes a las redes WiFi”, advierte Sergio García, de OneseQ. Como explica, las medidas de seguridad deben ir acor- des a la organización, protegiendo los activos más valiosos, pero, en cualquier caso, “lo que resulta realmente útil es disponer de un servicio gestionado 24x7, con un centro de operaciones de seguri- dad con especialistas velando por la seguridad de los sistemas. De 13 IOT El listado de beneficios y aplicaciones del IoT en la smart city es cada vez mayor.