CN50 - ICandela

situación sobre la realidad de 2011. Por aquel entonces, en cualquier catálogo de iluminación técnica, el porcentaje de productos con tecnología LED apenas llegaba al 50%, salvo excepciones contadas, y seguían apareciendo, por ejemplo, imágenes publicitarias de proyectores con lámparas QR111 halógenas. Por si ese eslogan no fuese suficiente, el artículo principal de ese número 00 nos informaba sobre la reciente celebración, en el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, de la Primera Jornada Técnica sobre LED, organizada por la Asociación Española de Fabricantes de Iluminación (Anfalum) y por el Comité Español de Iluminación (CEI). La tecnología LED ostentaba desde hace poco el título de solución de iluminación definitiva del futuro y los distintos fabricantes se encontraban enfrentados a la tarea de adaptar sus luminarias a esta nueva tecnología, o de desarrollar nuevos productos ya pensados desde el inicio para iluminar con LED. Asimismo, fabricantes que provenían de otros sectores como el de la electrónica, empezaban a irrumpir en el mundo de la iluminación, ofreciendo nuevas soluciones y suponiendo una amenaza para los fabricantes tradicionales. Hoy en día podríamos decir que, desde hace años, ningún catálogo de iluminación técnica o decorativa ofrece ya soluciones que no pasen por la tecnología LED, si bien es cierto que algunos productos continúan contando con fuentes de luz de casquillo tradicional (E27, E14, G9, R7s…). Además, la constante innovación hace, incluso, que cualquier solución publicitada que ya usase esta tecnología en 2011 sea vista hoy en día como una pieza obsoleta. Si salimos de la iluminación arquitectónica y entramos en el campo del arte y el espectáculo, la revolución que ha supuesto el LED ha sido todavía más radical. Cualquier persona en 2011 que, contenta tras leer los números 1, 2 o 3 de la revista iCandela, fuese al teatro, a un concierto o a una exposición, seguro que se encontraría, si se fijase, con grandes focos halógenos de luz blanca cálida cubiertos con filtros de color, o con luces estroboscópicas de fósforo. Hoy en día, con el LED y sus múltiples posibilidades de combinar colores, los sistemas anteriores son prácticamente historia. Solamente en el teatro persiste la luz blanca incandescente, ya que su alta reproducción cromática y su amplio rango de regulación siguen siendo inimitables. 2. CONTROL DE LA LUZ: ¡NUEVOS LENGUAJES! Del mismo modo en que la electrónica (el LED) se ha erigido como nueva forma de iluminar, también lo ha hecho, aunque en menor medida, como nueva forma de controlar. La tecnología LED fue tan revolucionaria porque supuso la irrupción irreversible de la electrónica en el sector de iluminación. A diferencia de los sistemas tradicionales (incandescencia, fluorescencia o descarga), el LED requiere, para su funcionamiento, de distintos componentes electrónicos Reading Light de Mynomadismlight. Luminaria portátil para el nomadismo. 19 EXPERIENCIA

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