6 6| 6 | | En nuestro país, y según el estudio que presentó durante el congreso Michela Mezzavilla, miembro de la Asociación Profesional de Diseñadores de Iluminación española -APDI-, en los aproximadamente diez años en los que esta disciplina profesional se ha empezado a dar a conocer, no ha evolucionado al ritmo que debería por el volumen de construcción que se ha ejecutado. Un alto porcentaje de arquitectos (principal cliente de estos profesionales), de constructores y de la propiedad aún no contratan los servicios de un diseñador independiente para realizar el proyecto de iluminación. Fabricantes, Consulting e ingenierías son mayoritariamente los que prestan sus servicios en este apartado. Lo que está claro es que la aplicación de las normativas, la necesidad de utilizar fuentes de luz altamente eficientes que proporcionen el máximo rendimiento con el mayor ahorro energético y que cumplan con los criterios de sostenibilidad, necesita cada vez más de profesionales especializados en esta materia y, no sólo desde un punto de vista técnico. Saber utilizar la luz, capaz de crear emociones, como elemento estético que aporta un valor añadido a la arquitectura es en la actualidad el objetivo fundamental. Los másters y estudios de postgrado impartidos por diferentes universidades y escuelas son los encargados de suministrar a los jóvenes arquitectos, interioristas, ingenieros y licenciados en Bellas Artes, la formación complementaria necesaria para cumplir con ese objetivo. Si una vez terminada su formación estos profesionales deciden llevar a cabo su actividad como diseñadores independientes, en el departamento técnico de un fabricante o distribuidor, o en un estudio de arquitectura, es lo de menos: lo importante es tener como meta alcanzar la excelencia en el trabajo que se realiza y el respeto por los colegas que comparten ese mismo criterio, lo ejerzan donde lo ejerzan. Porque, citando de nuevo a Michela, es con la colaboración de todos los que en algún momento “sentimos el flechazo de la luz” que conseguiremos implantar esa CULTURA de la LUz y revalorizar la profesión de Light Designer en este país. EDITORIAL Cultura de la luz MerCedeS arroyo Acabamos de estrenar año, nuestros mejores deseos para todos y uno en especial: que por favor no se cumplan las previsiones económicas. El año anterior nos dejó un buen sabor de boca, ya que la celebración en Madrid del Congreso de Diseñadores de Iluminación -PLDC- en cuanto a asistencia, organización y nivel de ponencias fue una prueba de la buena salud de la que disfruta esta profesión, por lo menos... a nivel internacional.