2018 LA ILUMINACIÓN, LA CUARTA HERRAMIENTA 59 Después de varias décadas de profesión y no ha- biendo encontrado el espacio físico ideal, me decidí a crearlo en mi estudio. Lo hice a imagen y seme- janza de una caja escénica teatral, con un peine superior, bambalinas laterales y superiores, foso para luz de horizonte, etc. A partir de ese momento pudimos ensayar los proyectos de nuestros clien- tes con la seguridad de que en el momento de la implementación no íbamos a tener sorpresas. La luz, nos permite, además de iluminar y equilibrar el proyecto, transmitir las emociones que, sin ella nos hubiera sido imposible. De ahí que, tener un espacio físico parecido al de una caja escénica nos permita es- tablecer esa comunicación con el espectador, con el objetivo de que el recuerdo de la visión quede ancla- do en la memoria. La emoción, en este caso funcio- na como un pegamento que asegura la adherencia y permanencia de la imagen durante mucho tiempo. La emoción es la luz, la cuarta herramienta. Un escaparate tiene una forma de lectura, un orden determinado, igual que en artes gráficas los occidentales empezamos a leer por la letra mayúscula situada arriba a la izquierda y acabamos por el punto final, emplazado abajo a la derecha Diseño y Realización: Alumnos LA LOCA RETAIL SCHOOL Temática: Ejercicio de equilibrio Volumen-color. Luz-sombras Iluminación: iGuzzini Diseño y Realización: Lisardo Mendo Cliente: ODOS visual merchandising Iluminación: iGuzzini Temática: Sant Jordi. Éste es el espacio físico perfecto, construi- do a imagen y semejanza de una caja escénica teatral. En este caso, se retiraron las dos terceras partes de las bambalinas. No se percibe ninguna fuente de luz, pero sí sus efectos. El libro, con una perforación cuadrada, permite ver la imagen de un corazón latiendo (pantalla de vídeo). También se lanzó al exterior el soni- do del corazón, de forma que los transeúntes se paraban atraídos por el sonido. La cultura está viva.