¿Qué es la Luz para Luis Lozoya? La Luz es una herramienta con la cual construyo mi quehacer profesional todos los días, es una forma de poder expresarme y al mismo tiempo representa la única parte de la Arquitectura que no es tangible. Solamente la percibimos a través de la vista. No es un objeto, no se puede tocar. Éste es el motivo prinicipal que me atrajo para empezar a trabajar con iluminacion, siendo Arquitecto. Estudiaste Arquitectura en la Uni- versidad Nacional Autonoma de Mé- xico, ¿cuál es la relación ideal entre la Iluminación y la Arquitectura? La de simbiosis. Creo que la arquitectu- ra es una forma de arte que, además, tiene que cumplir una función práctica. La iluminacion finalmente es la que de- fine los espacios, nos permite verlos, ya sea de día o de noche. Y a través de la visión podemos percibirlos y, al perci- birlos, disfrutamos de la arquitectura. Para mí, la amalgama que existe entre arquitectura e iluminación es fundamen- tal y viene de origen. No es algo que se le pueda agregar, es parte inherente del proceso arquitectonico. Creo que los arquitectos aspiran todos a tratar de lograr esta amalgama entre estos dos elementos, entre la arquitectura y la forma que la iluminación incide en la obra arquitectónica. Creo que cada vez más la participación de la luz se vuelve predominante por la necesidad de satisfacer la eficiencia energética en el interior del edificio y poder generar espacios que sean saludables para los usuarios. En 1994 fundaste el Estudio Luz + Forma, en Cd de México y fuiste pionero en la introducción de la profesion de Diseño de Ilumina- ción. ¿Has tenido que hacer mucha pedagogía? ¿Ha habido un esfuerzo mucho mayor en fomentar la cultu- ra de la iluminación? Bueno, creo que el esfuerzo más gran- de, al principio, es tratar de convencer a los arquitectos y a los desarrolladores de proyectos, que el Diseñador de ilu- minación era un componente necesario para sus ediicios. En ese momento los arquitectos eran los que decidían todos los aspectos, entre ellos la Iluminación. No existía en México, realmente, una especialidad como tal. Por lo tanto, al principio lo que se tenía que hacer era PROTAGONISTA|41 convencer a los clientes potenciales de que había una necesidad de asesorarse de alguien que estuviera especializado en ese campo. Posteriormente, he tratado en la medi- da de lo posible seguir en contacto con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), ya que ahí me formé. Siento que tengo una deuda con la ins- titución por la formación que recibí de la misma y he tratado en la medida de mis posibilidades de tratar de transmitir lo poco o mucho que he aprendido. ¿Es una forma de devolverle a la universidad todo lo que has apren- dido? Un poquito, sí. ¿Te sientes satisfecho, Luis, con los resultados de toda esta siembra que has hecho, de esta cultura de iluminación? Muy satisfecho. Ha sido un proceso muy largo, obviamente con altas y bajas, algunas situaciones complejas, por las condiciones del mercado y del país en el cual me estaba desenvolviendo. Pero creo que ha sido un proceso en el cual he aprendido y he tratado de seguir aprendiendo todos los días. Eso ha per-